Un mosso ha sido imputado por un juzgado de Barcelona por lesionar a un joven manifestante durante los disturbios de Can Vies, en el barrio de Sants, en mayo de 2014. El caso había sido archivado inicialmente, puesto que el juez consideraba que el chico había desobedecido a los agentes e incluso podía haberles agredido con la bicicleta que traía, pero la Audiencia de Barcelona ha obligado al magistrado a reabrir el caso basándose en unas fotografías.

Dichas imágenes han permitido identificar al agente que golpeó al chico, quien recibió un fuerte impacto en la oreja con la porra del agresor, provocando que ésta sangrara. La fotografía había sido publicada y generó controversia porque los protocolos prohíben a los agentes golpear en la cabeza.

El mosso está citado a declarar para el próximo 4 de noviembre como imputado, así como su mando más directo. El juez también ha pedido a los Mossos d'Esquadra que identifiquen al otro agente que se encuentra en las imágenes.