La mujer quemada con alcohol por su pareja fue al juzgado a retirar la denuncia por maltrato el 20 de agosto

La mujer que fue rociada con alcohol y quemada presuntamente por su pareja en una vivienda de la avenida Burjassot de Valencia había acudido al juzgado el pasado 20 de agosto, donde compareció para formalizar la retirada de una denuncia anterior por maltrato que había presentado contra su presunto agresor, según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana.

La mujer que fue rociada con alcohol y quemada presuntamente por su pareja en una vivienda de la avenida Burjassot de Valencia había acudido al juzgado el pasado 20 de agosto, donde compareció para formalizar la retirada de una denuncia anterior por maltrato que había presentado contra su presunto agresor, según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana.

En este caso, el juzgado de Violencia número 2 de Valencia es el competente en la investigación de la agresión. El hombre no ha pasado todavía a disposición judicial y la mujer se encuentra ingresada en el Hospital La Fe de Valencia, con quemaduras en el cuerpo, en estado estable.

La víctima había presentado una denuncia contra su pareja el pasado 14 de julio por maltrato. La denuncia recayó en el juzgado de Violencia número 3 de Valencia, por inhibición de un juzgado de Paterna.

En ese momento, se acordó una orden de protección, que aún estaba en vigor, de la que se dio cuenta a las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado. El 20 de agosto la víctima acudió al juzgado y compareció para formalizar la retirada de la denuncia, un hecho que se puso en conocimiento de la Fiscalía. La causa sigue abierta en ese juzgado.

Agentes de la Policía Nacional detuvieron este lunes al presunto autor de los hechos, un hombre de 41 años de nacionalidad española, acusado de rociar con alcohol y quemar a su pareja, de 37 años, en una vivienda de la avenida Burjassot de Valencia, donde él residía.

La mujer, de origen brasileño, fue trasladada distintas quemaduras hasta un hospital, donde está ingresada. El detenido tenía una orden de alejamiento en vigor sobre ella, aunque la agresión tuvo lugar en la vivienda propiedad de él, donde la mujer estaba ene se momento.

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