La Comisión Europea ha acordado imponer  a Telefónica una multa de 151,875 millones de euros (la más alta hasta hoy) por un abuso «muy grave» de posición dominante en el mercado español de Internet de alta velocidad. La compañía aplicó precios injustos con márgenes estrechos en la reventa de la infraestructura ADSL a sus competidores entre 2001 y 2006. Según la comisión, «con esta práctica Telefónica debilitó a sus competidores y dificultó su presencia y crecimiento». Al estrechar los márgenes entre los precios mayoristas y los que Telefónica cobraba a sus propios clientes, las demás empresas se veían obligados a incurrir en pérdidas si querían igualar los precios minoristas de la operadora, señala la Comisión, lo que también impedía bajar los precios a los usuarios. «Se espera disuadir a otros operadores en comportamientos similares», indica Bruselas.