El Grupo Parlamentario Socialista en las Cortes de Castilla y León ha presentado una Proposición No de Ley (PNL) en la que reclama al Servicio Autonómico de Empleo (Ecyl) la reposición de los 60 orientadores laborales despedidos en 2013 mediante un ERE de extinción.

Así lo ha anunciado este lunes el portavoz del Grupo, Luis Tudanca, tras reunirse en el Parlamento regional con representantes de estos trabajadores.

En declaraciones recogidas por Europa Press, Tudanca ha explicado que la PNL contempla, por un lado, la reposición de estos puestos de trabajo y su toma en consideración tanto en los programas actuales de empleo como en los nuevos que se aprueben próximamente, donde "se necesita el trabajo de los profesionales de la orientación laboral".

Entre ellos figuran el Programa Personal de Integración y Empleo (PIE), la Renta Garantizada de Ciudadanía (RGC), el Plan de Empleo para Jóvenes, el Programa Personal de Activación y Empleo (PAE), el Programa de Recualificación Profesional (Prepara) o la Renta Activa de Inserción (RAI).

Por otro lado, la proposición socialista también insta a realizar esta reposición con respeto del orden del proceso selectivo seguido para su contratación en 2008 a la hora de asignarles sus correspondientes destinos de trabajo.

Luis Tudanca ha recordado que la mayoría de los 60 trabajadores que perdieron su puesto en 2013 son mujeres y ha tachado de "inédito" que en el momento de crisis económica que hacía "más necesaria" la orientación laboral fuera el propio Servicio Público de Empleo quien aplicara un ERE para despedir a sus trabajadores.

El portavoz socialista ha recordado las "múltiples iniciativas" promovidas por su Grupo desde entonces en la Cámara autonómica y le ha pedido a la Junta de Castilla y León que "rectifique".

Bolsa de empleo

Por su parte, la representante de los trabajadores, Esperanza Rueda, ha señalado que el Ecyl "ha vuelto a contratar desde 2013", pero "no orientadores", a pesar de que los 60 despedidos pasaron a formar parte de una bolsa de trabajo que "no se ha llegado a utilizar".

Asimismo, Rueda ha apuntado que a la hora de establecer quiénes de los 108 orientadores laborales con que contaba el Ecyl seguirían en plantilla, se estableció un sistema de puntuación cuyas calificaciones "no se hicieron públicas".

Estos trabajadores llevaban una media de cuatro años y medio en el Ecyl, según ha confirmado Rueda, quien ha apuntado que actualmente la labor de estos orientadores labores "tan necesaria como antes o incluso más".