El tráfico de la capital sevillana vuelve a sufrir desde el viernes las consecuencias de las obras de construcción de la línea 1 del Metro.

La confluencia de la Enramadilla con Doctor Ordóñez de la Barrera y la Buhaira se corta hasta el día 22 para poder extraer la tuneladora, que actualmente está en la zona del apeadero de San Bernardo y que tiene que ser trasladada a Los Remedios para construir un segundo túnel.

Por ese motivo se ha preparado un plan especial de reordenación del tráfico en la zona afectada.

Las líneas de Tussam y del Consorcio Metropolitano de Transportes y otros servicios públicos se desviarán por Doctor Pedro de Castro y Miguel Rodríguez Piñero para conectar la Enramadilla y Ramón y Cajal. Miguel Rodríguez Piñero tendrá doble sentido para agilizar el tráfico, según explica la Junta.

Los residentes tendrán un carril exclusivo entre Enramadilla y Doctor Antonio Cortés Lladó para acceder a las viviendas afectadas y el tráfico privado procedente de la Enramadilla se desviará por la avenida de la Borbolla y la calle Juan de Mata Carriazo.

Los vehículos de Ramón y Cajal se reconducirán hacia Barrau y Vermondo Resta y las calles Torero Manolo Vázquez y Clara Campoamor cambiarán de sentido para poder acceder a Camilo José Cela y facilitar la incorporación a la Enramadilla.

Para sacar la tuneladora se montarán dos grúas de grandes dimensiones, con capacidad para poder levantar más de 1.000 toneladas de peso entre las dos.

Estas grúas ocuparán uno espacio de 18,6 metros de longitud por 12,36 de ancho y 16,13 de largo por otros diez de ancho.

La cabeza de la tuneladora se desmontará en varias piezas para trasladarlas a la estación Parque de los Príncipes en un transporte especial por las noches para evitar problemas de tráfico. El resto de elementos ha sido trasladado a Los Remedios a través del túnel existente.

El montaje de la cabeza en Los Remedios se prolongará hasta finales de mes, por lo que será en agosto cuando empiece a excavar el segundo túnel.