¿Moda o compromiso social?  La temática LGTB aterriza esta temporada como huracán en la gran pantalla a través de las historias, en su mayoría inspiradas en hechos reales, de gays, lesbianas y transexuales que muchos directores de cine han sacado del armario.

Al igual que en las series de televisión, este otoño-invierno la cartelera apunta con fuerza a este género que visibiliza al colectivo LGTB en la piel de actores y actrices tan potentes como Eddie Redmayne, Cate Blanchett, Julianne Moore o Naomi Watts.

Dos mujeres que se enamoran locamente en el Nueva York de los 50, la primera transexual conocida que se sometió a un cambio de sexo o dos lesbianas que luchan por la igualdad de derechos son algunas de las tramas que se podrán descubrir en este nuevo curso cinematográfico.

Violeta Assiego, activista LGTB, investigadora social y autora de blog 1 de cada 10, cree que este boom de películas "responde a un compromiso social más que a una moda",  un cambio marcado por lo que "está sucediendo en Estados Unidos de la mano de la política gay friendly del presidente estadounidense Barack Obama".

Assiego entiende que la normalización del matrimonio homosexual en el país norteamericano "ha dado un permiso explícito para que las productoras saquen del armario" estas películas.

"La temática LGTB está entrando en la agenda política, es otra etapa y en el cine esto se muestra, es la tolerancia más absoluta a los derechos humanos, un momento muy acorde a lo que se vive en otras disciplinas como en el deporte", explica la investigadora social.

También como espectadora del colectivo LGTB, Violeta Assiego considera que algunas de las cintas que se estrenarán este temporada como Carol, La Chica Danesa o About Ray, responden a una normalización de situaciones que se produce en todas las familias y países. "Ya no es un cine excéntrico o marginal, donde se contaban historias muy tormentosas. Trae calidad y visibilidad, con la posibilidad de llegar a muchos más espectadores",matiza.

Pero no solo ayuda a normalizar realidades, este compromiso social en el mundo del celuloide favorece "que las personas que estén dentro del armario puedan sentirse orgullosas de quienes son", asegura.

Paco Tomás, guionista y presentador del programa Wisteria Lane, de Radio 5 -único programa LGTB de la radiotelevisión pública- opina que el cambio en la industria del cine LGTB viene dado por el tratamiento de los personajes homosexuales. "A partir de los años 40 se hace un cine donde el homosexual era ridiculizado, mientras que en los 50 eran atormentados, nunca un personaje gay o lesbiana era feliz. O del mismo modo personajes torturados, que se acaban suicidando. Y después en los 80 llega el SIDA con personajes homosexuales como protagonistas" explica.

Tomás sitúa en los 90 la década en la que aparecen historias con personajes gays con conflictos similares a los heterosexuales, pero entiende que los problemas hay que seguir exponiéndolos: "Las películas que llegan ahora tienen mucho contenido real y los problemas los va a visibilizar, pero con otra actitud".

El presentador de Wisteria Lane cree que precisamente lo que no ayuda a la igualdad es la invisibilidad, "y si llegan desde un gran estudio o al gran público o con posible nominación al Oscar, sí atrae a mucha más gente".

Pese a los numerosos estrenos de este género que hay previstos para 2015 y 2016, Tomás considera que aún son insuficientes: "A lo mejor este año hay seis personajes lesbianas o gays y el año pasado hubo uno. No hay tanta visibilidad, por eso sigue siendo necesario".

No obstante, hay muchas películas con protagonistas gays, lesbianas o transexuales que se pierden porque no encuentran distribución. Por ello Tomás considera necesario que siga habiendo festivales especializados como el certamen LesGaiCineMad, que tendrá lugar del 30 de octubre al 13 de noviembre en Madrid.