Seúl y Washington barajan desplegar un submarino nuclear en Corea del Sur

  • EE UU reforzaría su presencia en la zona con un submarino de propulsión y armamento nuclear y un bombardero B-52 con bombas antibúnker.
  • "Corea del Sur y EE UU están revisando el calendario para el despliegue de activos militares estratégicos estadounidenses", ha anunciado Corea del Sur.
  • La presidenta surcoreana anunció que de no obtener disculpas norcoreanas seguirán funcionando los altavoces que emiten propaganda contra Kim Jong-un.
  • Ambas Coreas mantienen una reunión para intentar rebajar la tensión
Soldados de Corea del Sur son trasladados para tomar posiciones.
Soldados de Corea del Sur son trasladados para tomar posiciones.
YONHAP
Soldados de Corea del Sur son trasladados para tomar posiciones.

Los Gobiernos de Seúl y Washington están estudiando la posibilidad de desplegar un submarino con armas nucleares en Corea del Sur, informó este lunes la agencia surcoreana Yonhap, en plena situación de crisis militar en la región.

El portavoz del Ministerio de Defensa de Seúl, Kim Min-seok, reveló este lunes que "Corea del Sur y EE UU están revisando el calendario para el despliegue de activos militares estratégicos estadounidenses" en territorio surcoreano.

Estos activos incluirían un submarino de propulsión nuclear actualmente destinado en Yokosuka (Japón) y el avión B-52 Stratofortress, un bombardero estratégico subsónico de largo alcance equipado con potentes bombas antibúnker, según fuentes citadas por Yonhap.

Esta posibilidad se plantea en un momento en el que persiste la fuerte tensión militar entre Norte y Sur, al tiempo que autoridades de ambos países mantienen una maratoniana reunión de alto nivel para tratar de llegar a un acuerdo que ponga fin a las hostilidades y prevenga una escalada mayor del conflicto.

Los representantes de Seúl y Pyongyang llevan más de 18 horas reunidos en la segunda ronda de diálogo en la fronteriza Aldea de la Tregua de Panmunjom sin que de momento se hayan anunciado avances.

Se teme que el posible despliegue en Corea del Sur de un submarino estadounidense con capacidad nuclear desate las iras del régimen de Kim Jong-un que considera este tipo de acciones una amenaza directa a su seguridad, lo que supondría un nuevo obstáculo para las conversaciones bilaterales de paz.

Ambas Coreas se han visto envueltas en un grave episodio de tensión militar desde el jueves, día en que Norte y Sur intercambiaron disparos de artillería en la frontera.

Tras el suceso Pyongyang lanzó varias amenazas de ataque a Seúl, y ambos ejercitos han reforzado su preparación militar y mantienen sus tropas y equipos listos para un posible combate.

EE UU mantiene 28.500 tropas en Corea del Sur y se compromete a defender a su aliado en caso de conflicto con el Norte como herencia de la Guerra de Corea (1950-53), que finalizó con un armisticio nunca reemplazado por un tratado de paz definitivo.

Corea del Sur exige disculpas

La presidenta de Corea del Sur, Park Geun-hye, exigió en paralelo este lunes a Corea del Norte que se disculpe por sus dos presuntos ataques contra el país vecino y que han desatado una de las mayores crisis militares de los últimos años entre los dos países.

La jefa de Estado surcoreano anunció en una reunión con su gabinete que, de no obtener las disculpas norcoreanas, continuarán funcionando los altavoces que emiten propaganda contra el régimen de Kim Jong-un en la Zona Desmilitarizada (DMZ) y que han desatado las iras de Pyongyang.

Además, amenazó con tomar nuevas medidas de represalia contra Corea del Norte tal y como anunció previamente el Ministerio de Defensa, informó la agencia surcoreana Yonhap.

Corea del Norte había amenazado al Sur con una acción militar en caso de no apagar loa altavoces el pasado sábado, aunque este ultimátum ha quedado en vilo después de que los gobiernos de ambos países convocaran ese día una reunión de alto nivel para tratar de solucionar la crisis.

Altos funcionarios de Seúl y Pyongyang siguen reunidos en la Aldea de la Tregua de Panmunjom, en un maratoniano encuentro que hoy se prolongó por tercer día sin anunciarse avances.

Se cree que el estancamiento en el debate responde precisamente a las inflexibles posturas de ambas partes respecto a la cuestión de los altavoces y las disculpas que Seúl exige a Pyongyang por los dos ataques de los que le acusa.

Corea del Norte ha negado rotundamente su implicación en la explosión de minas que el día 4 causó graves heridas a dos soldados surcoreanos que patrullaban cerca de la frontera, y tampoco reconoce haber disparado primero en el intercambio de artillería que tuvo lugar el pasado jueves.

Mientras, las fuerzas armadas de ambos lados permanecen preparadas para el combate, en un ambiente marcado por la tensión.

Norte y Sur permanecen técnicamente enfrentadas desde la Guerra de Corea (1950-53), que finalizó con un armisticio nunca reemplazado por un tratado de paz definitivo.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento