El presidente de Asetra, Ovidio de la Roza, ha opinado este jueves en Gijón que la oferta presentada para la reanudación de la Autopista del Mar Gijón-Nantes no tiene "ninguna consistencia" ni ningún apoyo detrás claro y contundente, ya que no se conoce aún el plan sobre potenciales usuarios. Es por ello, que cree que es una forma del Ministerio de Fomento de "entretener el tiempo" mientras apoya a la línea marítima de Vigo.

De la Roza, en declaraciones a los medios de comunicación antes de participar en el Día del Autónomo en el marco de la 59 Feria Internacional de Muestras de Asturias en el recinto ferial gijonés 'Luis Adaro', ha sido rotundo y ha afirmado que Fomento apuesta "claramente" por Vigo y puertos gallegos en detrimento de Gijón.

Para él, no habrá recuperación de esta línea marítima en tanto no venga una naviera "con capacidad y experiencia" y que apueste realmente por ponerla en marcha. Es por ello, que ha augurado que Gijón no tendrá Autopista del Mar "en mucho tiempo", lo que hará desaparecer a Gijón del mapa de la multimodalidad en el transporte. "Entre todos la mataron y ella solo se murió", ha indicado.

Ha recalcado, en este sentido, en que el transporte a través de autopistas del mar está creciendo y ya la utilizan más del 50 por ciento de los camiones. Para él, Fomento seguirá potenciando hasta su reanudación a Vigo, Santander y Bilbao.

Presupuestos "indefendibles"

Preguntado por los Presupuestos Generales del Estado, ha considerado que la partida destinada a Asturias es "indefendible por parte de nadie". Y aunque ha reconocido que hubo obras importantes, como la finalización de la Autovía del Cantábrico, ha apuntado que en ferrocarril o transporte intermodal no hay "ni un solo euro".

Especialmente ha mencionado el caso del Plan de Vías, del que ha dicho que sin apoyo de Fomento "no va a salir jamás". A su juicio, la ausencia de partida demuestra una "falta de sensibilidad absoluta" por parte del Gobierno español.

Más optimista se ha mostrado sobre la marcha del sector, a lo que ha destacado que hay un incremento de la demanda que, si bien no puede dislumbrarse que se haya salido de la crisis, sí es un elemento "esperanzador".