La Guardia Civil ha imputado a un vecino de Vinaròs (Castellón) por un supuesto delito de maltrato de animales domésticos. Al parecer, el hombre esparció un líquido presuntamente nocivo que causó la muerte de dos perros y el ingreso en un centro veterinario de varios de estos animales, según ha informado la Benemérita.

La actuación de la Guardia Civil comenzó el 31 de julio, cuando dos vecinos de Vinaròs presentaron sendas denuncias en las que indicaban que sus perros habían fallecido después de pasar varios días ingresados en una clínica veterinaria. Ambos vecinos presentaron los respectivos partes médicos veterinarios, que indicaban que los animales habían fallecido a causa de la ingesta de algún tipo de sustancia química nociva.

Los agentes, que iniciaron una investigación para esclarecer los hechos, descubrieron que un hombre de 72 años, vecino de la zona, había esparcido un líquido presuntamente nocivo por la zona días antes de que se produjeran los envenenamientos.

Además, los guardias civiles tuvieron conocimiento de que dicho vecino había proferido amenazas contra los perros del vecindario en diversas ocasiones, argumentando que los mismos "molestaban a sus gatos". Por todo ello, le imputaron como supuesto autor de un delito de maltrato de animales domésticos.