El alcalde de Santander y presidente de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), el 'popular' Íñigo de la Serna, ha asegurado que las retiradas del busto del Rey en algunos ayuntamientos, como el de Barcelona, y la celebración de actos en los que se retira la bandera de España "no son propias de personas que tiene que respetar la Ley, le guste o no le guste y que tiene que tener labores de ejemplaridad".

Para De la Serna, gestos como los que están haciendo algunos alcaldes en estos días, "generan división y enfrentamiento" y "ponen en riesgo" lo que las generaciones que nos han precedido han conseguido para llegar a las cotas de bienestar actuales.

Se ha pronunciado de esta manera durante su intervención en el curso 'Monarquía, Constitución y Democracia. España en perspectiva comparada', que se imparte en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), en Santander.

En este foro ha defendido que si un alcalde ocupa ese cargo es gracias a la Constitución y al ordenamiento jurídico y ha opinado que "lo más importante que tiene que hacer es respetar las leyes".

Aunque ha defendido que es legítimo "intentar cambiar las cosas que a uno no le parecen bien", ha mantenido que hay que hacerlo cumpliendo con las leyes vigentes, que son a las que quienes ocupan un cargo público "han jurado respeto".

Ha recordado también que los alcaldes representan a todos los ciudadanos, y no sólo a quienes los han votado, y tienen la "obligación" de "saber administrar un legado, no sólo de tomar medidas sobre el futuro" que, según ha dicho, "no es de su propiedad" sino "del esfuerzo y del conjunto de muchas personas que han hecho posible que su ciudad y su municipio esté en el momento y en el punto en que está".

Romper la unidad de la femp,

Un "grave daño" al municipalismo

Además, ha señalado a los ayuntamientos como uno de los elementos institucionales que, a su juicio, mejor vertebran el territorio y la cohesión de España y ha opinado que la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) que preside "ha sido la mayor fortaleza del municipalismo porque la fortaleza la da la unidad".

"Es muy importante que, más allá de ideologías, todos entendamos que romper la unidad de la FEMP supondría un grave daño al municipalismo en su conjunto y para el propio país", ha defendido.

De la Serna ha explicado en el acto que dejará de ser presidente de la FEMP después de los resultados de las elecciones autonómicas y municipales del pasado mayo salvo que haya "un alarde de generosidad" por parte de los demás partidos políticos.

Así, ha señalado que, a pesar de que el PP ha conseguido "un mayor número de votos, de municipios y de mayorías absolutas", los pactos "antiPP" tienen como resultado más "votos FEMP" a favor de los demás partidos políticos protagonistas de estos pactos que para el PP.

Por otra parte, De la Serna ha reinvindicado en esta inauguración la figura del Rey como jefe del Estado y el papel que ha jugado y jugará la Monarquía, tanto en el caso de Juan Carlos I, que, en su opinión, contribuyó a fijar y afianzar la democracia en España; como Felipe VI, que, según el presidente de la FEMP, está otorgando su propia impronta a la Corona y está cumpliendo con responsabilidad y acierto la tarea que tiene encomendada.

"La estabilidad política y social no son algo que surja de un día para otro, sino algo que nuestro país se ganaron a pulso millones de personas en España para conseguir llegar a la etapa de paz y prosperidad que nuestro país vive desde hace ya décadas. Echar por tierra ese trabajo constituye un gravísimo error histórico", ha manifestado.

De la Serna, que ha mantenido varias reuniones con el actual jefe del Estado, ha destacado su "profundo" conocimiento de la realidad social, política y económica del país, y en especial de lo que tiene que ver con los municipios, y ha puesto en valor el apoyo al municipalismo español mostrado tanto por Felipe VI como por Juan Carlos I.

Durante su intervención en la sesión inaugural, De la Serna también ha aludido en su intervención a los cambios de calles "que van en contra de la propia Historia y ya no con cuestiones de carácter ideológico".