El presidente autonómico de la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF), Jesús Vicente Hernández, ha pedido formalmente "una reunión urgente" con el presidente, José Ignacio Ceniceros, y con la consejera de Sanidad, María Martín Díez de Baldeón, para trasmitirles "su honda preocupación por su intención de continuar adelante con las 'integraciones'".

Todo mientras "no se está teniendo ninguna consideración con los empleados públicos riojanos, quienes no han merecido mención alguna en ninguna de las comparecencias del nuevo Presidente".

CSIF, sindicato mayoritario en las administraciones públicas, recrimina a Ceniceros "por incumplir las promesas preelectorales de su partido, cuando se comprometió con este sindicato a dejar las cosas como estaban en cuanto al personal de la Fundación Hospital de Calahorra".

En cambio, ahora, según las declaraciones de esta misma mañana, "el Gobierno regional también quiere 'integrar' al personal del IRVI".

Para CSIF, "no es de recibo que el Gobierno tenga dinero para realizar estas integraciones y siga manteniendo los injustos, arbitrarios y contumaces recortes a los empleados públicos riojanos".

El partido en el Gobierno, continúan, "no respeta sus promesas". En su programa electoral, "manifestaba su intención de devolver los empleados públicos de forma progresiva los derechos arrebatados durante los últimos años. Ni el más mínimo gesto por parte de Ceniceros en sus intervenciones públicas con los trabajadores de la Administración regional".

Por el contrario, "sigue beneficiando al personal adscrito a la Fundación Hospital de Calahorra y, ahora, del IRVI que, no olvidemos, es personal que trabaja para la administración pero que no han adquirido la condición de empleado público, que se alcanza por oposición o después de haber superado un proceso selectivo con las garantías de igualdad, capacidad, mérito y publicidad que, en esta Comunidad, no se están respetando".

CSIF pidió al nuevo Gobierno "un ejercicio de reflexión para retomar la senda del diálogo y la negociación que permitiese, después de tantos años de sacrificios, el inicio de la recuperación de los derechos y las condiciones laborales perdidas por los empleados públicos: los 'canosos' y 'moscosos' (que acaten la sentencias yaemitidas), el resto de la paga extra suprimida, la carrera y desarrollo profesional, etc".

Finalmente, CSIF confía "en la sensatez de este nuevo Gobierno y le recuerda que la comprensión y paciencia de los empleados públicos no es ilimitada".