CUENCA, 17 (

Eurpa press)

Benjamín Prieto ha destacado este viernes que afronta su segundo mandato al frente de la Diputación Provincial de Cuenca con una hoja de ruta que pasa por la creación de empleo y riqueza, el freno a la despoblación y el envejecimiento y la puesta en valor del potencial patrimonial y natural de la provincia como principales ejes de su gestión, según ha trasladado en su discurso de investidura.

Tras jurar su cargo como presidente de la institución provincial, por 13 votos a favor y 12 abstenciones, y en un acto al que ha asistido la presidenta regional del PP, María Dolores de Cospedal, Prieto ha aseverado que es "la hora de la provincia de Cuenca".

Su acción de gobierno se basará en la puesta en valor de esos recursos, el apoyo a los emprendedores, con "especial interés" a los vinculados al vivero del entorno del Almacén Temporal Centralizado (ATC) de residuos nucleares en Villar de Cañas, que "convertirá a Cuenca en referente de investigación", la consolidación de la cultura como generadora de empleo, el fortalecimiento y proyección de la marca Cuenca como destino turístico de calidad y el impulso a medidas para el estimulo de la economía y el empleo.

Y todo ello, en un segundo mandato que encara con el reto de "no defraudar" y con una responsabilidad "reforzada por la experiencia de cuatro años" y con la intención de "no relajar el compromiso con la provincia, sus necesidades y sus problemas".

Entre sus objetivos, también figura el de convertir a Cuenca en "un referente en la investigación, formación y planificación de la gestión de los destinos turísticos" en el transcurso de un mandato para el que ha pedido a los diputados que actúen con "sentido de provincia" y en el que, ha dicho, será necesario "evitar que la administración se postre al servio de los partidos".

De otro lado, ha incidido en la exigencia de marcarse como "objetivo de vital importancia la recuperación de la estima de los ciudadanos" y de la "credibilidad que lo público local representa", para lo que "no existe mejor instrumento que la transparencia".

Por su parte, el portavoz del PSOE, Joaquín González, ha asegurado que su partido ejercerá la labor de oposición "desde un punto de vista totalmente constructivo". Como condición ha citado que se pongan en valor políticas de empleo, que la gestión del dinero se haga en beneficio del territorio y la calidad de vida de los ciudadanos.

Críticas al bipartidismo

En la misma línea, Ana María Sánchez, portavoz de Izquierda Unida —formación representada por primera vez en la Diputación de Cuenca—, ha pronunciado un discurso que ha provocado el abucheo de parte del auditorio por sus críticas, entre otras cuestiones, al bipartidismo y a la gestión del Gobierno regional durante el pasado mandato, que, a su juicio, "ha llevado a una gran parte de ciudadanos al paro, la pobreza y la exclusión".

Una gestión que se habría traducido, ha dicho, en una "imagen lamentable", con una provincia "abandonada a su suerte, con incremento de despoblación" fruto de la "falta de alternativas laborales, recortes sanitarios y asistencia social y cierre sistemático de escuelas".

También ha denunciado el "abandono calculado de la línea de tren convencional" y la postura mantenida por la Diputación al "apoyar la construcción del almacén de residuos radiactivos en Villar de Cañas", proyecto que ha calificado de "barbaridad calculada", fijándose como "primera preocupación el paralizar este disparate". Junto a ello, su trabajo se centrará en lograr una "transparencia real" en una institución a cuya corporación ha pedido que "use y abuse del diálogo entre los grupos en lugar de la aplicación sistemática de rodillos y mayorías absolutas".