El Senado ha aprobado este jueves, definitivamente, el techo de gasto para 2016 y los objetivos de estabilidad presupuestaria (2016-2018) con los votos del PP y UPN, mientras que la oposición ha mostrado su rechazo por considerar que son injustos y poco creíbles.

Con la aprobación de este jueves, el Senado ha ratificado el acuerdo alcanzado el miércoles en el Congreso y que da luz verde al límite de gasto no financiero aprobado el pasado viernes en el Consejo de Ministros, que fija en 123.394 millones de euros el gasto del próximo año, es decir, 5.666 millones menos que en 2015, un 4,4% de bajada.

El acuerdo, que supone el primer paso para la elaboración de los Presupuestos Generales del Estado, ha contado con 146 votos a favor mientras que 86 senadores lo hicieron en contra.

En el debate en el Senado, el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, ha insistido en que posponer los presupuestos interrumpiría la buena marcha del país y ha advertido de que hacerlo introduciría "elementos de incertidumbre".

En su última intervención en la Cámara Alta antes de la votación, el ministro ha insistido en que España está mejorando "por la política" y si no se reconoce esto, "se está haciendo un flaco favor a la tarea que está haciendo que el país avance".

Montoro ha dicho que el Gobierno entiende los planteamientos políticos en términos de pluralidad, pero ha subrayado que "gracias a la estabilidad política y a la amplitud del grupo popular, este jueves España está mejorando".

El ministro ha insistido en que la estabilidad política es "comulgar en unos objetivos y comprometer proyectos" y, en ese sentido, ha reiterado que la salida de la crisis pasa "inexorablemente" por la reducción del déficit y de la deuda pública.

En esta línea, ha recordado que "ser Europa" no garantiza que "un país hermano no entre en crisis, y entre en quiebra práctica y técnica". Al contrario, ha dicho, cuando ese país, en referencia a Grecia, no cumple las reglas de estabilidad económica, entra en quiebra y en colapso y eso "es lo que se trata de evitar en España".

Además del techo de gasto para 2016, el Senado también ha dado el visto bueno a los objetivos presupuestarios de déficit y deuda, que coinciden con los establecidos en el programa de estabilidad, presentado en Bruselas.

La nueva senda supone el cumplimiento de unos objetivos de déficit del 4,2% del PIB para 2015; el 2,8% en 2016; el 1,4% del PIB para 2017 y el 0,3% para 2018. El déficit de la Administración central se reducirá progresivamente hasta alcanzar el 0,2% del PIB en 2018 y el de la Seguridad Social el 0,1% ese mismo año.

Mientras tanto las comunidades autónomas y las entidades locales tendrán equilibrio presupuestario en 2018, siguiendo con la política de consolidación fiscal.