Los buses de la EMT volverán a adentrarse en los municipios cercanos a Valencia en los que históricamente venía dando servicio hasta hace tres años, cuando en plena vorágine de recortes se eliminó en Vinalesa, Alboraya y Mislata.

Así lo anunció ayer el alcalde de Valencia, Joan Ribó (Compromís), tras reunirse con el primer edil de Mislata, Carlos Fernández Bielsa (PSPV), un encuentro entre alcaldes de localidades vecinas que no se producía al menos desde 2011, año en que el socialista desbancó de la Alcaldía a los populares.

Ribó explicó que la línea 7 volverá a entrar a Mislata «lo antes posible» a un precio «razonable» para esta localidad y que lo mismo sucederá con las líneas daban servicio en La Patacona (Alboraya) y Vinalesa.

Además, añadió que instalarán bases de Valenbisi en las calles colindantes entre Valencia y los municipios lindantes, como Alboraya o Burjassot, además de Mislata, para facilitar la intermodalidad entre este sistema y el que se utiliza fuera de la capital.

Ribó y Bielsa comentaron que crearán un Consejo Metropolitano que coordine e impulse políticas de transporte público y movilidad, la huerta o servicios como el agua y los residuos sólidos en toda el área metropolitana.

El alcalde de Valencia, Joan Ribó, se mostró favorable y considera «razonable» la propuesta del portavoz socialista municipal, Joan Calabuig, sobre que sean profesionales las personas designadas para dirigir los organismos municipales autónomos de la ciudad de Valencia, como el Palau de la Música o la Fundación de Turismo.