Un total de 143 escolares de entre seis y doce años, pertenecientes a centros educativos del País Vasco, han creado originales trabajos que se expondrán en el espacio educativo del Museo Guggenheim Bilbao, en el marco del programa 'Aprendiendo a través del arte', cuyo objetivo es facilitar a los niños el aprendizaje de las materias del currículo escolar por medio del juego y de la práctica artística.

Esta muestra, que cuenta con el patrocinio de BBK y la colaboración del Departamento de Educación, Política Lingüística y Cultura del Gobierno Vasco, se podrá visitar desde este martes, 23 de junio, hasta el 20 de septiembre, en el espacio educativo del Museo inaugurado el año pasado para acoger actividades y exposiciones didácticas diversas.

Los artistas Elssie Ansareo, Naia del Castillo, Iñaki Gracenea, Maider López, Ainhoa Ortells y Jorge Rubio, en colaboración con los educadores del Museo Guggenheim Bilbao y los profesores de seis colegios de la Comunidad Autónoma del País Vasco, han diseñado y dinamizado los talleres en los que se han gestado estas inesperadas propuestas creativas.

El artista Jorge Rubio ha explicado que lo que se expone es "una parte de lo realizado en el curso, pero creo que será mucho más importante lo que no hemos hecho, lo que queda por hacer, las ideas que han surgido a lo largo de los trabajos, las posibilidades que cada uno ha intuido, las que vendrán y el uso que den ellos a lo vivido".

"Hemos aprendido unas reglas, unos modos. Solo hay que ponerlas en práctica, cada uno verá cómo y dónde. Yo no puedo dejar de hacerlo, cada día veo cosas diferentes y llevo muchos días jugando a este juego", ha añadido, en referencia a su trabajo con los escolares del CP Kueto de Sestao.

Los 143 "artistas" que componen la exposición Aprendiendo a través del arte pertenecen a seis colegios de Álava, Bizkaia y Gipuzkoa. Los escolares de 4º curso del CP Arrateko Andramari, de Eibar, enumeraron, clasificaron y sumaron lo que comen en una semana, dibujaron las siluetas de estos alimentos sobre papeles de colores y recortaron tantas siluetas como alimentos habían consumido, lo que les permitió reflexionar sobre la alimentación saludable.

Para culminar este aprendizaje, los niños idearon un divertido juego, "la carne siempre con verdura" y así, se dividieron en dos grupos: el de las proteínas de rojo y el de las vitaminas de verde. Los de rojo, que representaban a la carne, tendían a juntarse entre ellos y la función del equipo verde, el de la verduras, era colocarse siempre en el medio como acompañantes de las carnes.

Los alumnos de 2º curso del CP Birjinetxe, de Bilbao, aprendieron cómo se reproducen los animales. Buscaron información y fotografías sobre animales vivíparos y ovíparos y, con esa documentación, crearon dos esculturas: una en forma de huevo gigante, que fabricaron con papeles de periódico y escayola, y añadiendo diferentes elementos, como plumas, picos y huevos más pequeños. La segunda escultura reproducía el vientre de una hembra a través de una estructura en forma de saco.

Para completar su proyecto, los escolares inventaron la historia de un día en la vida de estos animales, imitando y grabando sus sonidos.

Por su parte, los escolares del 5º curso del CP Kueto, de Sestao, analizaron su entorno cercano a través de la fotografía y ayudándose de sus tabletas digitales. Tomaron fotografías en las aulas de elementos como bolígrafos, mochilas, desconchados de la pared, lámparas fluorescentes o pupitres, y experimentaron con las posibilidades de la fotografía mediante enfoques cortos, barridos, picados y contrapicados, convirtiendo lo figurativo en abstracto.

De esta manera, descubrieron originales puntos de vista sobre lo que les rodea y, al mismo tiempo, fueron conscientes de las posibilidades estéticas y creativas de las nuevas tecnologías.

Los artistas más pequeños de esta edición de Aprendiendo a través del arte, los de primer curso del CP Lamuza de Llodio, crearon cuatro enormes murales que contenían el mismo paisaje en varios momentos del año.

Así, representaron el paso de las estaciones eligiendo los colores más adecuados en cada paisaje y añadiendo texturas, como hojas recortadas o pequeñas piedras decorativas blancas simulando la nieve o el hielo.

Este recorrido por las estaciones del año culminó con un divertido pase de modelos en el que los escolares desfilaron con gorros para la lluvia, paraguas, guantes, chubasqueros o gafas de sol con el objetivo de teatralizar todas las situaciones climatológicas.

Los alumnos de 2º curso del CP Otxarkoaga, de Bilbao, se esforzaron en expresar las emociones y los sentimientos a través del arte y la geometría. Dibujaron sentimientos valiéndose de líneas, curvas o rectas y de formas geométricas como triángulos o círculos.

Además, reinterpretaron los "árboles de la vida", esculturas típicas de la tradición popular mexicana, vinculando un color a cada emoción. Con estos elementos crearon un bosque de emociones lleno de colores simbólicos.

Los escolares de 6º curso del CP Ramiro de Maeztu, de Oyón, trabajaron los sistemas de representación del paisaje como planos, mapas, cartas o planisferios. A través de estos conceptos reflexionaron sobre las migraciones, la diversidad de origen de muchos de ellos y su integración en la nueva comunidad.

Cada alumno recortó en papel un fragmento de paisaje según su visión particular y, entre todos, compusieron una gran panorámica utilizando la técnica de los papeles pegados del artista Henri Matisse.