Al igual que la pequeña Melody, Javi Cantero fue una de las grandes apuestas de "El Fary".

Javi siempre cuenta que cantaba a escondidas en su casa porque "le daba vergüenza". Fue su madre la que le descubrió y se lo dijo a su padre. Un día, "El Fary le puso delante de una guitarra y le dijo: ‘venga Javi, cántate un pellizquito'.

Así, con 17 años, Javier Cantero se lanzó a la aventura musical con el sello Muxxic. Aficionado al flamenco y también a la música disco, debutó en 2001 con un disco homónimo que seguía la línea abierta por grupos como "Estopa", con el que consiguió un disco de platino.

Dos años más tarde, y ya convertido en ídolo de adolescentes y arropado por la buena acogida de su primer trabajo, sacó en 2003 un segundo álbum llamado "Tracalcatraca".

"Y cuanto más acelero" es su gran éxito.

"Ser hijo de El Fary me ha influido para bien y para mal", contaba en una entrevista Javi, "porque evidentemente lo tienes más fácil para entrar en el mundo de la música, pero por otra parte la gente siempre va a estar atenta y a intentar sacarte el mínimo defecto o las similitudes con tu padre, aunque aquí no hay nada que comparar, porque mi padre canta una cosa y yo canto otra".