Tres turnos de descanso

Para intentar que la situación no derive en un auténtico

caos, el Sergas pone unos límites a las vacaciones: en cada centro no podrá faltar más de un tercio de la plantilla al mismo tiempo. Y no será la única restricción que se implante este verano. Según los sindicatos, también será necesario que se paralice o se reduzca al mínimo la actividad en los programas de atención especializada.

Así, planes de reciente implantación en los centros de salud como las cirugías menores o la asistencia ginecológica apenas funcionarán durante los meses de verano. Su continuidad es, según los trabajadores, incompatible con la atención a las consultas habituales.

Con todo, los que más notarán las vacaciones serán los niños, ya que en algunos ambulatorios sólo hay un pediatra. Y aún no hay sustituto.

El Canalejo también se relaja

No sólo los médicos de cabecera y los pediatras se van de vacaciones. También los facultativos del complejo hospitalario Juan Canalejo se tomarán su descanso a lo largo de los próximos meses. Y tampoco encuentra sustitutos. Tanto es así que hace unos días la gerencia del complejo publicó un anuncio para buscar médicos para el Servicio de Urgencias. Sin embargo, tanto la dirección como los sindicatos coinciden en que no hay personal en la lista del paro.