Las mafias de la inmigración ilegal han establecido dos rutas para traer irregulares a España desde Argelia. La primera nace en Orán y algunas localidades de la zona (Cap Blanc, Sidi Salem y El Bouni) y tiene por destino a Murcia o Almería, a 150 kilómetros. La segunda nace en Argel y la ciudad vecina de Dellys y tiene a las islas Baleares como destino, a 260 kilómetros, según explicaron a 20 minutos fuentes policiales.

 

De momento, el tráfico de pateras no es tan numeroso como el que llega a Canarias. En lo que va de año han arribado a Mallorca y Menorca cuatro embarcaciones con 60 argelinos. "La colaboración con la Policía de Argelia es muy buena, y ella ha abortado en sus playas la salida de más de 150 pateras", señalan las mismas fuentes.

De hecho, la Marina Nacional de Argelia declaró el 1 de junio el estado de emergencia, ahora que llega el verano, ante el riesgo de una avalancha de salida de pateras y cayucos. A Murcia y Almería ya han llegado este año más de diez. Aunque, para ser exactos, explica la Comandancia de la Guardia Civil en Baleares, no estamos hablando de pateras, sino de "embarcaciones más rígidas, pequeños pesqueros robados, o comprados, o que iban a ser desguazados y a los que se les añade un pequeño motor".

Nuevo radar de vigilancia

El Gobierno acaba de colocar hace unos días en la costa sur de Mallorca un radar móvil (SIVE) que permite detectar embarcaciones en un radio de 40 millas. Doce guardias civiles controlan este radar.

Con Argelia existe un acuerdo de repatriación desde 2002 que tiene dos condiciones: devolver a los sin papeles en el transbordador de une Alicante con Orán y no entregar a más de ocho argelinos en cada viaje.

Dos pateras con 97 inmigrantes fueron interceptadas ayer. La primera navegaba próxima al sur de Tenerife, y la otra, a 64 millas de la isla.

Van a repatriar a 8 y vuelven con 12

La Policía ha descrito como «surrealista» la situación que el 30 de mayo vivieron agentes de la Unidad Central de Expulsiones y Repatriaciones de la Brigada de Extranjería. Ese día, los policías viajaban en el ferry con destino a Orán escoltando a ocho argelinos que habían llegado a España ilegalmente en abril. El viaje de ida transcurrió sin incidencias. En el de vuelta, una vez repatriados estos argelinos, el ferry tuvo que auxiliar a una patera en alta mar que llevaba a bordo a otros 12 argelinos. Tras subir al ferry, viajaron a España. «Expulsamos a ocho, pero volvimos con doce», explican fuentes policiales.