La Consejería de Educación, Cultura y Deporte ha aprobado 110 proyectos de Formación Profesional Dual que comenzarán a desarrollarse el próximo curso 2015/16. Los alumnos que cursen esta modalidad de FP recibirán formación tanto en el centro educativo como en empresas del sector afín a sus estudios. De esta manera se implica en el futuro de los jóvenes andaluces no solo a la administración educativa sino también al tejido productivo andaluz.

Según una nota de prensa, en esta convocatoria se han presentado un total de 127 proyectos de todas las familias profesionales elaborados por los 84 centros docentes que imparten la FP Dual en Andalucía. De los proyectos aprobados, destacan los relacionados con los ciclos formativos de nueva implantación como el de Excavaciones y Sondeos o el de Ganadería y Asistencia Animal en la provincia de Huelva, de Confección y Moda en la provincia de Córdoba, de Gestión de Alojamientos Turísticos en Jaén o de Aprovechamiento y Conservación del Medio Natural en Almería.

Todos los proyectos cuentan con la colaboración de las empresas más significativas del entorno de los centros educativos en los que se imparten estas enseñanzas.

El próximo curso serán 1.512 los alumnos que estudien esta modalidad de FP en alguno de los nuevos proyectos o en aquellos que se implantaron en el curso 2014/15.

Asimismo, la Consejería de Educación, Cultura y Deporte ha acordado con más de un millar de empresas y entidades su participación en la FP Dual. Desde pymes hasta grandes multinacionales, empresas de producción, de servicios, artesanales, innovadoras y tecnológicas han mostrado su apoyo y compromiso con esta modalidad de FP como la vía de desarrollo económico y social de Andalucía.

La FP Dual comenzó en Andalucía con 11 proyectos experimentales en el curso 2013/14, incrementándose en el curso 2014/15 hasta 41 proyectos. Los resultados de estos proyectos pioneros son el reflejo de los beneficios de este tipo de formación donde el alumnado está más motivado, con una formación más ajustada a las necesidades del mercado laboral y con un menor índice de abandono escolar.

Además, las empresas están más comprometidas, ya que ven en esta modalidad de formación una oportunidad no solo de formar a sus futuros trabajadores, sino también de mejorar la profesionalización del sector. Por su parte, los centros educativos han incrementado y mejorado las relaciones con las empresas de su entorno y el profesorado ha podido conocer en mayor profundidad los procesos de trabajos de las empresas.