La compleja y fascinante obra de Louise Bourgeois (1911-2010), una de las artistas más influyentes de los siglos XX y XXI, llega este miércoles al Museo Picasso Málaga (MPM) donde permanecerá expuesta hasta el 27 de septiembre  Por este motivo, se ha instalado en el patio de la pinacoteca Araña (1996), una de sus esculturas más reconocidas, con casi ocho metros de diámetro y más de tres metros de altura.

En esta retrospectiva, comisariada por Iris Müller-Westermann y titulada Louise Bourgeois. He estado en el infierno y he vuelto, el MPM mostrará más de un centenar de obras de arte que la artista realizó a lo largo de siete décadas. Un tercio de esas obras jamás se había expuesto hasta ahora.

La muestra está organizada con el Moderna Museet de Estocolmo y permitirá admirar trabajos de Bourgeois de los años 40 y 2009. Un total de 46 esculturas de bronce, tejido, látex y aluminio, una celda y una pintura se mostrarán junto a 53 obras en papel y textiles, muchas de ellas de gran formato o realizadas en series. La selección de obras de esta retrospectiva engloba la complejidad de su trabajo: escultura, dibujo, pintura, instalación, etcétera.

La artista, que abordó todos los géneros, creando una obra autobiográfica singular, lírica y radical, nació en París en 1911, en el seno de una familia acomodada que regentaba un taller de restauración de tapices medievales y renacentistas. En 1938, partió hacia Estados Unidos, donde residió el resto de su vida.

Miembro del American Abstract Artists Group, obtuvo el reconocimiento de la crítica y el éxito comercial tras la retrospectiva que le organizó el MoMA en 1982, habiendo cumplido ya los 71 años. Su producción, original y compleja a la vez que diversa y fascinante, aborda la memoria, la sexualidad, la maternidad y la frustración.

Bourgeois concibió esculturas de todo tipo de tamaños, creó sugerentes dibujos y grabados, construyó inquietantes instalaciones, confeccionó figuras con diversos tejidos y creo las gigantescas arañas de metal que la hicieron mundialmente conocida. Ya sea en bronce, madera, acero o mármol, o innovando con tela y caucho, la artista representa a menudo formas orgánicas sexualmente explícitas, emocionalmente agresivas, que hablan de vulnerabilidad del ser humano y su necesidad de protección, en un entorno amenazante y turbador.

Precisamente, la carrera de Louise Bourgeois presenta una serie de coincidencias con la del artista malagueño Pablo Ruiz Picasso: nacidos en un contexto burgués, ambos crearon la mayor parte de su obra en otro país; la innovación y la experimentación fue una constante en sus trayectorias y la obra de ambos es una referencia ineludible para las generaciones de artistas posteriores.

Además, coincidiendo con la apertura al público, se llevará a cabo este jueves y viernes un seminario en el que expertos reflexionarán sobre la obra y figura de esta artista, así como acerca de la relevancia de las mujeres en España a partir de la década de los 50.

En este sentido, el 11 de junio participarán en este seminario la comisaria de la exposición, Iris Müller-Westermann, y la conservadora emérita del Musée du Louvre, Marie-Laure Bernadac; mientras que un día después será el turno de las profesoras de Estética y Teoría del Arte y de Historia del Arte en la Universidad Autónoma de Madrid, Rocío de la Villa y Patricia Mayayo, respectivamente; la directora de la Galería Isabel Hurley de Málaga, Isabel Hurley, y la artista multidisciplinar Concha Jerez, quienes debatirán acerca de 'El papel de la mujer artista en España desde los años 50'. Las conferencias y mesa redonda tendrán lugar a las 19.00 horas en el Auditorio MPM.

Tras Sophie Tauber-Arp. Caminos de vanguardia (octubre 2009-enero 2010) e Hilma af Klint. Pionera de la abstracción (octubre 2013-febrero 2014), el Museo Picasso Málaga aborda de nuevo una retrospectiva que pone en valor el trabajo artístico de la mujer en la historia del arte.