Un grupo de viticultores franceses ha puesto en jaque al gobierno francés: o suben los precios de las uvas o "correrá sangre", según publica el BBC News.

El grupo, que pertenece a la región de Languedoc, se autodenomina Unión para la Acción Viticultural (Crav) y ha puesto como fecha tope al gobierno para que cumpla sus demandas este fin de semana.

Rebelión centenaria

La fecha coincide con el centenario de la última rebelión de los fabricantes de vino, que acabó con seis huelguistas muertos en manos del ejército francés.

Hoy luchan por la supervivencia porque, según declaran portavoces del grupo, han perdido entre el 40 y el 50% de sus ingresos debido a la caída de precios y al alto porcentaje de ganancias que se llevan los intermediarios.

Afirman que su trabajo "no les da ni para alimentar a sus familias".

Comunicado por video

Los "guerrilleros del vino" han emitido un video en el que aparecen 7 fabricantes de vino, con las caras ocultas tras pasamontañas y leen un comunicado que contiene la escalofriante advertencia de usar las armas si fuera necesario.

Por tanto, este será uno de los primeros conflictos a los que se tendrá que enfrentar Nicolas Sarkozy, en un país en el que este domingo se está eligiendo el color del Parlamento.