El PSOE de Santiago ha criticado este viernes que, en la reunión con Compostela Aberta, la formación liderada por Martiño Noriega únicamente buscase recibir su apoyo de cara al pleno de investidura y que, para ello, no aportase "razones o motivaciones".

Lo ha dicho el portavoz socialista en el Ayuntamiento de Santiago, Paco Reyes, quien ha incidido en que el encuentro no sirvió para conocer "por qué" su formación debería apoyar a Noriega para hacerse con la alcaldía, pues no se abordaron "propuestas" concretas.

Así, si bien ha mantenido que está "a favor" de permitir que el regidor de Teo en funciones se haga con el bastón de mando, ha puntualizado que eso no implica un voto favorable el 13 de junio. Así es que se debate entre abstenerse en la votación o bien votarse a sí mismo, lo cual no obstaculizaría la elección de Martiño Noriega.

Preguntado sobre la posibilidad de que el sufragio de los nueve ediles del PP se sume al de los cuatro socialistas en su favor y, con ello, pueda hacerse con la alcaldía, ha dado por hecho que no ocurrirá. "No creo que el PP me vote", ha apostillado.

En la misma línea, ha argumentado que "no sería aceptable para el PSOE recibir el voto del PP" y se ha mostrado partidario de "aceptar la decisión de la ciudadanía", que relegó a la opción que él encabeza al tercer puesto con la pérdida de cinco concejales.

"ciudad de izquierdas"

Con todo, sí ha admitido que el alcalde en funciones, el popular Agustín Hernández, le propuso "en dos ocasiones" la posibilidad de intentar un acuerdo, a lo que él se negó.

"La ciudadanía pidió una ciudad de izquierdas", ha profundizado, antes de interpretar que los vecinos han dicho a su partido que "no quieren que gobierne" sino que "fiscalice" la acción ejecutiva y, además, que sea "garante" de la realización de "políticas progresistas".

Falta de concreción

En cuanto a la reunión mantenida el jueves con Compostela Aberta, Reyes ha expresado su "sorpresa" por que el partido que ganó las elecciones municipales en la capital gallega no materializase "propuestas".

En cambio, el PSOE situó como "líneas rojas" suscribir un código ético, elaborar una ordenanza de transparencia, garantizar la supervivencia del Consorcio, duplicar los fondos para políticas sociales, impulsar la participación y mejorar la accesibilidad en los edificios.

Asimismo, demandó que Compostela Aberta "clarificase" su postura en lo relativo a la remunicipalización de servicios y sobre la eventual fusión con ayuntamientos limítrofes.

Por el momento, dada la falta de concreción que detectó en Compostela Aberta, el socialista ha interpretado que los asuntos en los que ambos grupos pueden tener "más proximidad" son el urbanismo y la política social.

Más allá de esto, ha indicado que él acudió a ese encuentro porque le "importa" la "estabilidad" de la ciudad y ha considerado que era "una ocasión" para que Noriega —que no forma parte de la comisión negociadora de Compostela Aberta— también estuviese presente.