Los trabajadores de la factoría de Nissan en Ávila están llamados a un referéndum el viernes para manifestar su opinión sobre el preacuerdo alcanzado este miércoles por la empresa por UGT y Sigen-USO y que no ha sido apoyado por CCOO.

Según los sindicatos que apoyan el preacuerdo, se ha conseguido que no haya despidos, mantener el empleo, evitar traslados, aumentar la carga de trabajo y reincorporar a los 12 empleados pendientes de readmisión del expediente de regulación de 2010.

También incluye la prejubilación de cerca de una veintena de empleados, que son cerca de medio millar en la actualidad, e implantar una doble escala salarial para los nuevos trabajadores.

El acuerdo se ha alcanzado tras una reunión que se desarrolló desde el mediodía del martes hasta las 6.00 horas del miércoles, que luego se reanudó.

En la asamblea que UGT ha celebrado con sus afiliados esta tarde se ha expresado que "sin ser el acuerdo idóneo, es el mejor posible desde el punto de partida", cuando la empresa quería despedir a más de un centenar de empleados, según ha dicho su portavoz, Iván Zazo.

Por su parte, CCOO, que celebrará la asamblea el jueves, considera el acuerdo "inasumible", que supone "una pérdida muy grande de poder adquisitivo, no proporcional con las concesiones hechas", según un comunicado.

La negociación del convenio, que va unida a la reducción de costes y a la mejora de la competitividad de la factoría, se inició a finales de 2014, y entre medias contó con una jornada de huelga y la presentación de un expediente de extinción de empleo que fue retirado a las pocas horas de su presentación.