Las organizaciones territoriales de Podemos en Castilla-La Mancha, Asturias y Baleares son las únicas que han manifestado claramente su intención de dejar en manos de sus simpatizantes la postura que adoptarán en los debates de investidura para constituir los futuros Ejecutivos autonómicos; una consulta que es de carácter voluntario, al no tratarse de pactos de gobierno.

Los estatutos que Podemos aprobó en su asamblea constituyente de otoño en Vistalegre establecen que es competencia de la asamblea territorial —es decir, todos los inscritos de la formación en el censo de la Comunidad— "aprobar o rechazar cualquier tipo de pacto o alianza pre o post electoral para las instituciones de representación de ese orden territorial".

Según han explicado a Europa Press fuentes de la formación en los diferentes territorios, los mencionados "pactos o alianzas" post electorales son aquellos que implican un acuerdo de Gobierno. De este modo, la posición que los nuevos parlamentarios adopten en los debates de investidura, que en muchos casos determinará el signo de los Gobierno autonómicos, no se enmarca dentro de dichos pactos.

No obstante, aunque no es obligatorio, algunos candidatos de Podemos en las pasadas elecciones autonómicas del 24 de mayo han decidido someter también esta postura a votación entre sus simpatizantes. Es el caso del cabeza de lista en Castilla-La Mancha, José García Molina, también secretario general del partido en esta región.

"Vamos a solicitar una consulta ciudadana para que vosotros podáis decirnos qué tenemos que hacer", anunció el propio Molina el pasado domingo durante el acto que celebró la formación en Toledo con motivo del Día de Castilla-La Mancha.

En esta región, el voto de los dos diputados autonómicos que obtuvo Podemos en los comicios determinará si la actual presidenta en funciones y secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, sigue al frente del Ejecutivo de Castilla-La Mancha, o si éste pasa a manos del candidato socialista, Emiliano García-Page, ya que los votos de Podemos y el PSOE suman justo los 17 escaños necesarios para sacar adelante su investidura con mayoría absoluta.

También ha manifestado su intención de consultar con los simpatizantes el candidato a la Presidencia de Asturias, Emilio León. En este caso, el cabeza de lista asturiano se plantea dejar en manos de sus bases no sólo la postura de Podemos en la investidura sino también la decisión de presentar su candidatura a presidir el Principado, según ha explicado Podemos Asturias a Europa Press.

En el caso asturiano, al PSOE le bastaría con el apoyo de Podemos para sacar adelante su investidura, ya que los 14 escaños de los socialistas más los 9 de la formación morada suman justo los 23 necesarios para la mayoría absoluta.

La dirección de Podemos en Baleares también quiere dejar en manos de sus bases su postura en las negociaciones. Según han explicado fuentes de la formación a Europa Press, se realizará una consulta a las más de 10.000 inscritos en las Islas para que sean ellos los que decidan entre las diferentes opciones que barajan.

En Baleares, el partido de Pablo Iglesias ha afirmado que está dispuesto a llegar más allá en las negociaciones con Mès, y no ha descartado entrar a formar parte del fututo Ejecutivo balear, siempre que este no esté presidido por el PSOE. Estos tres partidos juntos suman los 30 escaños necesarios para la mayoría absoluta.

Consultas sobre las condiciones

En otras Comunidades, como Aragón, Extremadura o Navarra, donde el apoyo de Podemos también es fundamental para formar Gobierno, Podemos no realizará una consulta para decidir su voto en la investidura, pero sí está contando con sus bases para detallar las condiciones que pondrán sobre la mesa a la hora de negociar su apoyo, en los dos primeros casos con el PSOE, y en el navarro, con Geroa Bai.

Así, en estas y en el resto de regiones la formación actuará como ya lo hizo en Andalucía tras las elecciones autonómicas del 22 de marzo. En aquel momento, Podemos ya explicó que la decisión de votar a favor o en contra de la investidura de la candidata socialista Susana Díaz —que todavía no se ha producido—, o de abstenerse, no requería ser consultada a las bases.

Al igual que en el caso andaluz, Podemos se ha marcado como principal línea roja en las negociaciones abiertas tras el 24 de mayo no entrar a formar parte de ningún gobierno presidido por el PSOE, aunque sí están dispuestos a favorecer investiduras de los candidatos socialistas para sacar al PP de los ejecutivos autonómicos, siempre que el PSOE cumpla sus condiciones y esté dispuesto a dar "un giro de 180 grados".