Neumosur, la sociedad científica que aglutina a los neumólogos y cirujanos torácicos del sur de España, solicita a las fuerzas políticas y administraciones públicas con motivo del Día Mundial sin Tabaco la implantación de un "empaquetado genérico" como "medida efectiva para reducir el consumo de tabaco, en especial entre los fumadores de menor edad que se incorporan al hábito tabáquico".

Con esta petición, Neumosur se suma a la propuesta realizada por la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (Separ) y el Comité Nacional para la Prevención y Tratamiento del Tabaquismo (CNTP) al Gobierno de implantar en España el conocido como 'plain packaging', medida amparada por la Organización Mundial de la Salud (OMS), según ha informado este miércoles la propia sociedad científica en una nota.

Estudios recientes elaborados en Australia, primer país del mundo que adoptó en 2012 esta fórmula de una cajetilla neutra, carente de atractivo visual, manifiestan que en tres años el consumo de tabaco ha descendido del 15,1 al 12,8 por ciento, lo que ha motivado que países como Irlanda y, más recientemente Reino Unido, hayan decidido instaurar la misma medida en estos últimos dos años, a la que se sumará Francia en mayo de 2016.

"Está constatado que los paquetes de tabaco genéricos, que carecen del atractivo que puedan otorgarle un determinado diseño, captan menos fumadores nuevos", ha explicado el coordinador del grupo de Tabaquismo de Neumosur, Marcos García, que ha apuntado que a ello hay que sumar que "las advertencias sanitarias en estos envoltorios más sobrios generan un impacto mayor entre los consumidores".

Para Neumosur, la implantación de este empaquetado genérico debe ir acompañada de "una política que evite el aumento del contrabando de tabaco", una problemática que ha cobrado "especial importancia" en Australia tras la implantación del paquete neutro —ha ascendido "un 25 por ciento"— y que en España ya "azota de manera destacada a Andalucía, donde recientemente han sido desarticuladas varias redes de distribución y venta de cajetillas ilegales".

El tabaquismo en andalucía

Según se resalta desde Neumosur, Andalucía es "una de las comunidades autónomas españolas con una prevalencia de tabaquismo más elevada", de forma que el consumo de tabaco en dicha comunidad, "según las últimas cifras disponibles, se sitúa actualmente por encima del 27 por ciento, con un preocupante pico máximo de prevalencia en el grupo poblacional entre 25 y 44 años", y es "reseñable el notable aumento de las adolescentes fumadoras", de forma que España cuenta con "una de las tasas más altas del continente, por encima del 30 por ciento".

Estos especialistas alertan de que este hecho va a propiciar que, "a finales de este año, las muertes por cáncer de pulmón —cuyo desarrollo está estrechamente ligado al hábito tabáquico— supere en números de casos al de mama, hasta la fecha, el más prevalente entre las mujeres españolas".

En esa línea, el doctor García Rueda ha manifestado que "la puesta en marcha de medidas legislativas para restringir el tabaco en determinados espacios públicos ha favorecido que el número de fumadores varones descienda", y "ahora el reto es hacer disminuir el dato en las mujeres, que tengan conciencia de que el tabaquismo se vincula con más muertes por cáncer de pulmón o por enfermedades crónicas como la EPOC, y que también sean conscientes que esas muertes son prevenibles, ya que el tabaco es la principal causa de muerte evitable".

"Alrededor de 29 problemas de salud están asociados al tabaco, que provoca un gasto sanitario y social del 1,7 por ciento del PIB, casi el doble de los impuestos que recauda el Estado por esta droga", según Neumosur, que apunta que "un caso paradigmático de las patologías asociadas al consumo de tabaco es la EPOC que, en al menos el 70 por ciento de los casos es atribuible al tabaquismo, y cuyos costes sociales, laborales y sanitarios suponen 2.400 millones de euros/año", un dos por ciento del presupuesto anual del Ministerio de Sanidad y Consumo y un 0,25 por ciento del PIB.

El coste sanitario medio generado por cada paciente se ha estimado en 1.752 euros al año, de los que "más del 80 por ciento corresponden a gastos hospitalarios y fármacos". Se calcula que "el gasto sanitario medio que supone un individuo desde el momento en que se le diagnostica la enfermedad, alrededor de los 50 años, hasta el final de su vida asciende, según estimaciones conservadoras, a unos 30.050 euros, sin tener en cuenta la importante repercusión sobre la calidad de vida de los pacientes y sus familiares".

Los especialistas de Neumosur recomiendan "optimizar el impacto de la tributación como intervención de salud pública, destinando la totalidad de los ingresos fiscales asociados a la compra de cajetillas a promover intervenciones efectivas para el control del tabaquismo y programas de prevención en colectivos especialmente sensibles como los jóvenes, así como a sufragar los tratamientos de probada eficacia disponibles para dejar de fumar".