La Junta de Andalucía analiza las posibles fórmulas de gestión para el centro de recepción de visitantes del yacimiento de Puente Tablas, situado a las afueras de Jaén, para el que, además, ya ha pedido la licencia de apertura.

Así lo ha indicado este martes la delegada territorial de Educación, Cultura y Deporte, Yolanda Caballero, a preguntas de los periodistas sobre la situación de este edificio construido para dar a conocer el 'oppidum' o ciudad fortificada del mismo nombre en el marco del programa Viaje al Tiempo de los Íberos que pretende poner en valor el importante patrimonio de esta cultura que atesora la provincia.

Según ha explicado, en este tiempo se ha estado realizando "todos los trámites que eran necesarios de cara a poder abrir el centro", desde el suministro eléctrico hasta cuestiones de saneamiento y depuración de vertidos. "Hemos procedido también a solicitar la licencia de apertura al Ayuntamiento, que se hizo con fecha 8 de mayo de 2015", ha precisado.

Caballero ha agregado que cuando estos trámites estén cumplimentados se cerrará la gestión, para lo que ahora se están "valorando varias fórmulas en conjunción con la Secretaría general de Cultura para ver cuáles son las más adecuadas", desde su asunción directamente a externa a través de una empresa cultural.

"Hay empresas interesadas y, por supuesto, nosotros estamos encantados también de que participe la iniciativa privada", ha comentado, por su parte, la secretaria general de Cultura de la Consejería de Educación, Cultura y Deporte, María del Mar Alfaro, también presente en la comparecencia convocada sobre otra de las paradas del Viaje al Tiempo de los Iberos: el Museo de Arte Ibero de la capital.

Al centro de recepción de visitantes de Puente Tablas, junto a otras actuaciones para adecuar el yacimiento, se han destinado unos 1,1 millones de euros financiados por la Junta y la Diputación jiennense en el marco del citado programa, que supone una red de yacimientos y centros de interpretación que ya permite conocer enclaves como la ciudad íbero-romana de Cástulo, en Linares; la cámara sepulcral de Toya en Peal de Becerro, las tumbas de Cerrillo Blanco, en Porcuna, y el santuario de la Cueva de la Lobera, en Castellar.

En el caso del de la capital, la temática estará centrada en la vida cotidiana de los íberos, así como en las peculiaridades de este 'oppidum' con una cronología entre los siglos VIII al III a.C. También se han señalizado en él itinerarios peatonales que permiten recorrer el yacimiento y espacios como el palacio de príncipe.