La comisión de Pesca del Parlamento Europeo ha acordado este miércoles aplazar sin nueva fecha el voto sobre la propuesta de la Comisión Europea de prohibir todas las artes de enmalle a la deriva, incluidas el 'xeito' gallego y el 'sardinal' malagueño; a la espera de una consulta de procedimiento sobre varias enmiendas presentadas que pedían tumbar el plan de Bruselas.

"Queda aplazado a una fecha ulterior y desconocida", ha informado el presidente de la comisión europarlamentaria, el popular francés Alain Cadec, al inicio de la sesión en la que estaba previsto el voto de un informe que marcara la posición de la Eurocámara de cara a las negociaciones de la nueva norma con Bruselas y los Estados miembros.

La decisión la han acordado los coordinadores de los grupos políticos y el objetivo es cursar una consulta de procedimiento a la comisión sobre Asuntos Constitucionales del Parlamento Europeo (AFCO), para aclarar si pueden ser tramitadas varias enmiendas que piden tumbar la propuesta del Ejecutivo comunitario.

Cadec es el encargado ahora de remitir la consulta a la comisión competente, aunque ha lamentado tener que aplazar el voto por una cuestión de procedimiento y ha advertido de que AFCO se ha pronunciado hasta la fecha sobre 51 enmiendas similares y "ninguna ha sido considerada no admisible".

En concreto, las dudas afectan a tres enmiendas (22, 23 y 24) que indican que "el Parlamento Europeo rechaza la propuesta de la Comisión". Dos de estas enmiendas han sido suscritas por Cadec y una de ellas, además, cuenta con el apoyo de los eurodiputados españoles del PP Gabriel Mato, Francisco José Millán Mon, Carlos Iturgáiz y Verónica Lope Fontagné.

En la justificación de la enmienda del PPE, los eurodiputados se muestran a favor de regular la pesca de deriva, pero piden al Ejecutivo comunitario estudios científicos y una evaluación del impacto socioeconómico de las restricciones.

El informe que debía votarse este miércoles, de la eurodiputada socialista italiana Renata Briano, considera "excesivamente radical" la prohibición total de las redes de deriva que plantea Bruselas, pone en duda que haya datos científicos que avalen esta decisión y apuesta por excluir y regular de manera específica las pesquerías a pequeña escala, como el 'xeito'.

Briano era partidaria de mantener abierta la vía de la negociación con el Ejecutivo comunitario para flexibilizar la propuesta y eximir del veto completo a las artes artesanales y tradicionales. Sin embargo, otros diputados rechazan de plano el planteamiento de Bruselas, a quien quieren forzar a redactar una nueva iniciativa.

Hasta 45 pesquerías con redes de deriva en nueve Estados miembros operan en aguas comunitarias y, según un estudio de la Eurocámara, la mayoría de los 3.640 buques que las componen son de pequeño tamaño.

Propuesta heredada de la comisaria anterior

Pese a que la propuesta de prohibir todas las artes de deriva fue una idea de la anterior comisaria de Pesca, Maria Damanaki, en mayo de 2014, el actual responsable de Pesca y Asuntos Marítimos, Karmenu Vella, dijo a los pocos meses de asumir el cargo que no tenía intención de modificarla. El objetivo de Bruselas es cerrar un acuerdo antes de que acabe el año, lo que permitiría aplicar la nueva norma desde 2016.

Sin embargo, los Veintiocho, que también tienen que definir su posición antes de iniciar las negociaciones, no han debatido sobre la cuestión desde hace meses ni está previsto en la agenda de sus próximas reuniones, según fuentes europeas, que consideran que el voto de la Eurocámara podría ser un "estímulo" que acelerara el ritmo.

En el pasado, varios Estados miembros han mostrado reservas a aprobar un veto total y países como España son partidarios de una norma "suavizada", con la que prohibir las redes de deriva de grandes pelágicos, pero no la actividad de los más pequeños, que a cambio sería regulada.