El presidente de Italia, Sergio Mattarella, inauguró este sábado un nuevo servicio de tren de alta velocidad entre Roma y Milán, las dos principales ciudades de Italia, que empezará a funcionar en junio, informó la sociedad ferroviaria Trenitalia.

Los nuevos trenes pueden alcanzar una velocidad máxima de 400 kilómetros por hora y una velocidad comercial de 360 kilómetros por hora, aunque circularán de momento a 300 kilómetros.

Este sábado la conexión inaugural tardó 2 horas y 55 minutos en cubrir el trayecto entre Roma y Milán, pocos minutos menos que las conexiones disponibles en la actualidad, aunque el objetivo es reducir el tiempo hasta las 2 horas y 20 minutos, según los medios.

Desde el 14 de junio Trenitalia, del grupo Ferrovie dello Stato, ofrecerá ocho conexiones directas sin paradas entre la capital italiana y la ciudad lombarda con el nuevo Frecciarossa 1000, fabricado por el consorcio ítalo-canadiense Ansaldo Brera Bombardier.

Posteriormente, la frecuencia de los trenes aumentará a 14 diarios desde septiembre y desde diciembre será de 22, según una nota de Trenitalia, que indicó que algunos trenes irán también a los destinos de Turín (norte) y Nápoles (sur).

Cada tren Frecciarossa 1000 dispondrá de una capacidad de 455 asientos más dos para pasajeros con movilidad reducida distribuidos en ocho vagones, cuyo interior ha sido diseñado por Gruppo Bertone, la empresa especializada en fabricación de carrocerías y diseño de automóviles fundada en 1912.

Trenitalia ha encargado a los fabricantes un total de 50 unidades de este tren, por un valor de 1.600 millones de euros, y la entrada en servicio de la nueva conexión está previsto que comience después de la inauguración de la Exposición Universal de Milán, que abrirá el próximo 1 de mayo.

Este sábado el tren con el que se escenificó la futura apertura del servicio comercial fue bautizado con el nombre de Pietro Mennea, el velocista italiano fallecido en 2013 que ganó la medalla de oro en los 200 metros en los Juegos Olímpicos de Moscú de 1980.