Los servicios de prevención y extinción de incendios del Gobierno aragonés contarán con 1.250 efectivos en esta campaña, distribuidos en 70 cuadrillas y 80 puestos de vigilancia. El 53 por ciento de la superficie de la Comunidad autónoma es forestal.

El consejero de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente de Aragón, Modesto Lobón, y el director general de Gestión Forestal, Roque Vicente, han presentado este viernes, en rueda de prensa, el operativo, que estará a pleno rendimiento del 16 de junio al 15 de septiembre.

Lobón ha señalado que este año se mantendrán los efectivos que se fijaron tras el incendio de Castanesa (Huesca), ocurrido en 2012, y también continuará la táctica de aplicar la máxima potencia de los servicios de extinción "en el primer golpe" para apagar el fuego "lo antes que se pueda".

Roque Vicente ha explicado que en 2015 se mantienen las líneas prioritarias de otros años, que son la intervención sobre las masas forestales para adecuarlas y protegerlas, disponer de medios preventivos y de extinción "adecuados" a lo largo de todo el año, incorporar nuevos sistemas de lucha contra el fuego y la coordinación entre Administraciones.

Cuatro fases

El operativo se estructura en cuatro fases, la primera —de baja intensidad— durante todo el mes de enero, seguida por una fase media del 1 de febrero al 15 de junio, a la que sigue la etapa de máxima intensidad, del 16 de junio al 15 de septiembre y, por último, un periodo durante el que se van desactivando los medios paulatinamente, desde el 16 de septiembre hasta el 31 de diciembre.

Este año habrá, en la época de más intensidad, 62 cuadrillas terrestres y ocho helitransportadas, de las que 22 estarán en la provincia de Huesca, tres de ellas aéreas, otras 24 en la de Zaragoza —dos helitransportadas— y 24 más en Teruel, con tres cuadrillas aéreas. En total habrá 446 efectivos en las terrestres y 96 en las aéreas.

Asimismo, se activarán 39 autobombas, 10 en Huesca, otras tantas en Zaragoza y 19 en la provincia de Teruel, donde hay más en virtud de los convenios con la Diputación Provincial de Teruel (DPT) y algunas comarcas.

Habrá 80 puestos fijos de vigilancia ubicados estratégicamente en función del riesgo de incendios, 24 de ellos en el Alto Aragón, 20 en la provincia de Zaragoza y 36 en la de Teruel, con 170 personas en total. Vicente ha destacado que estos puestos contribuyen a la "rápida detección" de los incendios.

Los medios aéreos son "indispensables" para actuar con rapidez, ha continuado el director general, quien ha comentado que hay un helicóptero en Alcorisa (Teruel) durante todo el año y después se incorporan ocho más en Ejea de los Caballeros (Zaragoza) y Peñalba (Huesca), uno de ellos dedicado a labores de coordinación.

A estos profesionales, se unen 327 agentes de protección de la naturaleza y 57 técnicos del Departamento de Medio Ambiente, así como personal especializado en la coordinación y la investigación de las causas.

Por su parte, el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente pone a disposición de la Comunidad Autónoma un helicóptero en Plasencia del Monte (Huesca), la Brigada de Refuerzo contra Incendios Forestales (BRIF) de Daroca (Zaragoza), dos aviones anfibios en Zaragoza y una unidad móvil de meteorología y, en caso de que sea necesario, puede destinar recursos de regiones cercanas. La Unidad Militar de Emergencias (UME) también está preparada para intervenir en grandes incendios.

Modesto Lobón ha destacado "la enorme importancia" de la coordinación, que entre los Departamentos del Gobierno es "absoluta", resaltando la "incardinación en un solo operativo" del servicio SOS 112 Aragón y los efectivos de prevención y extinción contra el fuego

Además, "hay una alianza" entre las instituciones, lo que permite recibir apoyo de otras Comunidades autónomas cuyos servicios pueden acceder con más facilidad, en algunos casos, a las zonas incendiadas, lo que Aragón ha hecho otros años en la provincia de Castellón.

87 INCENDIOS

Desde el 1 de enero hasta el 19 de abril se han producido 87 incendios forestales en Aragón, que han afectado a 122 hectáreas, lo que supone una reducción de un 40 por ciento respecto de la serie histórica. Del total, 36 han ocurrido en Huesca, dañando cuatro hectáreas arboladas, 40 en Zaragoza —77 hectáreas— y 11 en la provincia de Teruel, con 19 hectáreas.

Los incendios han sido intencionados en el 13 por ciento de los casos, de origen desconocido en el 15 por ciento y por negligencias en el 66 por ciento de los casos, "de ahí la importancia de la sensibilización", ha dicho Roque Vicente.

El director general ha hecho notar que los montes están "llenos de recursos" y que los incendios tienen "consecuencias muy graves para las economías locales y comarcales".

METEOROLOGÍA

Roque Vicente ha expuesto que las variables meteorológicas condicionan el resultado del trabajo del operativo forestal. Al respecto, ha indicado que durante el mes de febrero las temperaturas han sido más bajas de lo habitual, entre 2 y 3,5 grados por debajo de la media, mientras que en marzo se han situado entre un grado y un grado y medio por encima de lo habitual en el tercio norte de la Comunidad y el eje del Ebro.

Las precipitaciones también influirán en la campaña de verano. En febrero, el tercio sur ha estado muy seco, aunque se ha compensado con las lluvias de la segunda quincena de marzo, por lo que el "combustible" forestal está ahora en condiciones "normales" para esta época del año.

El objetivo de este año es prevenir el fuego en 2.600 hectáreas de masa forestal, abrir cortafuegos en 700 hectáreas y realizar tratamientos en 800 de zonas boscosas. Asimismo, el Departamento realiza quemas controladas en las zonas donde hay una elevada carga ganadera y una demanda para mejorar los pastos.

SARGA

El titular de Medio Ambiente ha dejado claro que este es "un trabajo muy arriesgado, fuera de lo normal" y ha felicitado a los miembros del servicio, que presta la sociedad pública SARGA, tras lo que ha pedido "colaboración ciudadana", ya que el 66 por ciento de los incendios forestales se deben a negligencias.

Lobón ha aseverado que el Gobierno tiene la voluntad de cumplir la Ley de Montes, que obligaría a aumentar los efectivos de lucha contra el fuego, "y tan pronto lo permitan los Presupuestos la Comunidad lo va a cumplir".

Roque Vicente ha apuntado que este año las cuadrillas tendrán siete días más de trabajo, recuperando las jornadas que no se realizaron el año pasado.