La modificación de la Ley de Renovación y Modernización Turística aprobada este martes en el Parlamento de Canarias abre la puerta a la legalización de más de 8.000 camas turísticas de una veintena de hoteles de Tenerife, entre ellos el Parador de Las Cañadas del Teide.

Así lo han avanzado este jueves en rueda de prensa el presidente insular, Carlos Alonso, y la consejera de Planificación, Pino de León, quienes han detallado que a raíz de una enmienda impulsada por la corporación insular, se regularizará un conjunto de establecimientos que operan de forma alegal al no tener autorización administrativa por no cumplir determinados trámites urbanísticos o sectoriales.

Alonso ha comentado que la otra alternativa era promover el cierre de estos complejos con el consiguiente impacto negativo en el empleo, y ahora, se regularizan con un "compromiso" de mejora de los establecimientos.

Ha puesto como ejemplo el caso de la urbanización Ten Bel, en Arona, reducida a "cadáveres de edificios" o a un uso residencial que no ha sido el "adecuado".

Según Pino de León, ahora se les va a exigir, para acometer la regulación, los estándares urbanísticos del momento en que se concedió la licencia, todas anteriores a 2001. "Es una garantía de seguridad jurídica para la explotación turística, de la que dependen puestos de trabajo", ha indicado.

Asimismo, ha comentado que la modificación permite resolver el desarrollo de "destinos maduros" como el Puerto de la Cruz a través del plan de modernización, con incentivos para poder acometer la rehabilitación hotelera. "Era paradójico que no se pudieran acoger", ha destacado.

Sobre la fijación de plantillas mínimas en los hoteles, Alonso no apoya la propuesta del PSOE, pero sí ha abogado por fijar una clasificación de hoteles en base a los servicios, ya que eso, por sí mismo, va a generar empleo. "El sector crea empleo no imponiendo un número mínimo de empleos sino creando valor y servicios", ha destacado.