Un estudio pide a los medios de comunicación evitar el "sensacionalismo" en materia de inmigración

Un estudio sobre periodismo e investigación, desarrollado por la ONG 'Red Acoge', reclama a los medios de comunicación evitar el "sensacionalismo" y la "criminalización" de la inmigración. El informe, denominado 'Inmigracionalismo', que definen como "sensacionalismo en las noticias sobre inmigración". También, indican que este término define la "manipulación informativa sobre la inmigración tendente a provocar miedo, odio y confusión".
Presentación informe 'Inmigracionalismo
Presentación informe 'Inmigracionalismo
EUROPA PRESS
Presentación informe 'Inmigracionalismo

Un estudio sobre periodismo e investigación, desarrollado por la ONG 'Red Acoge', reclama a los medios de comunicación evitar el "sensacionalismo" y la "criminalización" de la inmigración. El informe, denominado 'Inmigracionalismo', que definen como "sensacionalismo en las noticias sobre inmigración". También, indican que este término define la "manipulación informativa sobre la inmigración tendente a provocar miedo, odio y confusión".

El estudio, realizado a lo largo de 2014, ha sido presentado esta mañana en la Casa de los Periodistas, por parte de sus autores, Manuel Sobrino y Enma Garrido. Se ha realizado a partir del seguimiento de 1.700 noticias en medios de comunicación, encuestas a un centenar de periodistas, análisis de diversos libros de estilo y un focus group con informadores especializados en este ámbito, y va acompañado de una campaña en redes sociales junto a un vídeo que, mediante la parodia, ilustra la tendencia a dramatizar las informaciones sobre inmigración.

Según han indicado los autores, del estudio se desprende en los medios de comunicación la creación de estereotipos, la criminalización, la falta de contextualización de las informaciones, el alarmismo, la escasez de testimonios de inmigrantes, el protagonismo de fuentes de información gubernamentales, la asociación entre inmigración y pobreza, el uso del lenguaje incorrecto y el uso de un lenguaje "alarmista, sensacionalista y bélico".

Tanto Sobrino como Garrido han reconocido que "no existe mala intención de los periodistas a la hora de tratar este tipo de información", sino que lo han achacado "a falta de tiempo o de formación en este ámbito" como errores que podrían subsanarse con "interlocución" entre las partes.

Entre las recomendaciones que han dado a conocer se encuentran "contextualizar la información y buscar la raíz del conflicto", que derivaría en "interesarnos por las personas como individuos, y no como parte de una colectividad homegénea".

En este punto, han indicado que "es difícil acceder a esa información, pero los periodistas deberían poder contar con la complicidad de las ONG para facilitar más información que les ayude en su trabajo".

La "honestidad" en el tratamiento informativo, que han indicado beneficia al sujeto de la migración y al conjunto de la sociedad", así como "eliminar barreras, haciendo más hincapié en construir puentes", además de "tratar cada proceso migratorio, en la medida de lo posible, como algo particular, y no como migraciones organizadas, homegéneas o regulares", son otras recomendaciones ofrecidas.

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