Un exdirectivo de Terra Mítica ve "imposible" que se pagara dos veces por el mismo trabajo y anima a comprobar las obras

El ex director técnico del parque temático de Benidorm (Alicante) Terra Mítica Antonio Rincón ha asegurado que es "imposible" que se pagara dos veces por el mismo trabajo y ha animado a comprobar que las obras están ejecutadas: "Las facturas están todas ejecutadas. Podemos ir a verlos --los trabajos-- a Terra Mítica cuando quieran. No había duplicidades y el propio inspector de Hacienda dice que los trabajos están hechos", ha reiterado.
Juicio Terra Mítica
Juicio Terra Mítica
EUROPA PRESS
Juicio Terra Mítica

El ex director técnico del parque temático de Benidorm (Alicante) Terra Mítica Antonio Rincón ha asegurado que es "imposible" que se pagara dos veces por el mismo trabajo y ha animado a comprobar que las obras están ejecutadas: "Las facturas están todas ejecutadas. Podemos ir a verlos —los trabajos— a Terra Mítica cuando quieran. No había duplicidades y el propio inspector de Hacienda dice que los trabajos están hechos", ha reiterado.

Rincón, ingeniero de caminos, se ha pronunciado así en su declaración como acusado en el juicio del caso Terra Mítica, en el que se ha investigado un fraude de 4,4 millones de euros en la construcción del parque temático de Benidorm. Se enfrenta a una pena de 10 años de prisión, tal y como le solicita provisionalmente el ministerio fiscal.

El acusado ha llegado a pedir alguna explicación a la fiscal —a la que llamaba señora— y a preguntar a la Abogacía del Estado por qué era relevante lo que le interpelaba, hasta el punto de que el tribunal le ha llamado la atención y le ha pedido que se limitara a responder lo que se le preguntaba.

Rincón ha explicado que llegó al parque en abril de 1999, ante la "necesidad" de la empresa de contar con un ingeniero de su perfil. Su trabajo consistía en coordinar los trabajos y a las 250 empresas que había en Terra Mítica "para que no hubiera injerencias entre ellas". Cuando él llegó, ha aseverado que los grandes contratos ya estaban dados —Global Idom y Bovis—. "Cuando yo llego, ya estaba todo formado", ha repetido.

El acusado, que ha insistido en la importancia y la grandiosidad de la obra al aseverar que Terra Mítica "son 110 campos de fútbol, uno al lado del otro, y todos a la vez construyéndose", ha explicado que él no tiene ni idea de contratación ni de precios, y ha asegurado que tampoco conocía a las subcontratas: "Si no conocía a muchas de las grandes empresas, imagínese a las subcontratas", ha expuesto.

Así, sobre el protocolo de contratación que había en el parque, ha indicado que no sabe "absolutamente nada" y que él no tenía ningún papel en el mismo. "Yo no decía nada desde el punto de vista técnico para hacer contrataciones. Y nunca elegí a ninguna empresa para hacer los trabajos". Preguntado por si había contratación verbal, ha afirmado que lo desconoce, pero ha agregado que si la había, "sería por alguna emergencia y luego ya se harían los documentos necesarios", ha remarcado.

Visto bueno de gerencia

El acusado se limitaba —según ha dicho— a coordinar trabajos y a dar el visto bueno a las certificaciones cuando ya venían supervisadas por la dirección facultativa (Global-Idom) y por la gerencia. "Cuando venía todo con el visto bueno de la gerencia, no hay duda de que estaba correcto", ha aseverado el acusado, quien ha aclarado que no se encargaba de comprobar si los trabajos estaban efectivamente ejecutados.

Interpelado si con su firma quedaba aceptada la obra, ha respondido que "las certificaciones llevaban un proceso bastante farrogoso". "Había una gerencia —ha agregado— que se dedicaba exclusivamente a medir y a validar cuantitativamente la certificación; y otra gerencia que valoraba cualitativamente. Con la firma de la gerencia, la factura estaba validada completamente", ha aseverado, y ha apostillado: "Para mí era fundamental la firma de la gerencia para validar la factura".

El acusado ha insistido en que no conocía a la mayoría de empresas del parque, y tampoco a los subcontratistas, pese a que se le han mostrado diversas facturas en las que figura su firma con algunas subcontratas. Interpelado por este extremo, ha dicho: "Imagino que quien me pediría que certificase esto, me enseñaría facturas, el contrato, etc, y vería que estaba con el visto bueno de la gerencia", ha señalado.

También ha subrayado que es "imposible" que se pagara dos veces por el mismo trabajo: "Eso es imposible. Estaba la gerencia para controlar todo eso. No se podían hacer dos trabajos por lo mismo, había más de 150 técnicos supervisando. Es imposible que eso pueda suceder", ha repetido.

Visitas "importantes"

Rincón ha justificado algunas facturas que se le han mostrado en trabajos de limpieza "porque había muchas visitas institucionales, muchas", ha dicho. "Terra Mítica era una cosa inmensa, son 105 hectáreas de terreno, y se hicieron muchos trabajos de limpieza por las visitas", ha señalado. Sobre estas visitas, ha citado alguna como la de la actual alcaldesa de Madrid, Ana Botella; la alcaldesa de la Vega Beja; la entonces ministra de Cultura; "o incluso nos visitaron los jueces", ha agregado, para concluir diciendo: "Llevamos ya 12 años en esto y no sabemos por qué".

Tras Rincón, le ha llegado el turno a otra de las acusadas en el procedimiento, Alicia García, quien junto con su marido, José María Arráiz, constituyeron una empresa —AST Ingenieros— que emitió facturas presuntamente falsas a proveedores de Terra Mítica. Se enfrenta a una pena de cinco años y siete meses, tal y como reclama el ministerio fiscal.

La acusada, con formación en técnico publicitario y decoración, ha afirmado que pese a que figuraba como administradora de esta mercantil, no trabajaba nunca ahí ni tenía ningún tipo de implicación con la misma. Ha indicado que su marido le pidió que figurase como administradora y ella aceptó. "Lo encontré lógico, además", porque "era solo por si ocurría alguna cosa, para que estuviera otra persona".

Pero ella —ha insistido— no firmó nada, ni cheques ni pagos ni proyectos. "Yo no tengo nada que ver con la actividad de la empresa, no he firmado nada ni sabía de que iba esto", ha apostillado.

Su marido, Arráiz, quien se enfrenta a la misma pena de cárcel, ha corroborado la versión que ha ofrecido su mujer y ha insistido en que ésta figura como administradora solidaria de AST porque se lo pidió él, "por si algún día pasaba algo, para que la empresa pudiera continuar". También ha señalado que en Terra Mítica no hizo nada, pero sí ha defendido otros trabajos realizados facturados a sus proveedores. Ha concretado que solo se le acusa de una factura supuestamente falsa.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento