El Cuerpo Nacional de Policía intensificó los servicios de escolta en Aragón y promovió el incremento de las medidas de autoprotección entre sus agentes durante los últimos días, según declaró a Europa Press el portavoz del sindicato Unión Federal de la Policía (UFP), César Lambea.

"Era lo que esperábamos", continuó Lambea, quien recordó que "en nuestro trabajo nunca nos podemos fiar de una banda terrorista y nunca se baja la guardia". Ahora se dan "las peores perspectivas", dijo el sindicalista.

Por su parte, el portavoz del Sindicato Unificado de la Policía (SUP) en Aragón, Alfredo Crespo, coincidió con Lambea en que "era lo esperado", es decir, que "entendemos que la tregua era un 'impasse', nunca hemos creído que ETA estuviera en situación de desaparecer, era cuestión de tiempo" la reanudación de la violencia . Desde el SUP "nunca hemos creído que hubiera ninguna tregua, ni que llegara a buen puerto esta situación". A partir de ahora, "seguiremos en la misma línea de siempre y habrá que combatir el terrorismo con la Justicia y con la Policía".

Por su parte, el portavoz en Aragón de la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), José Marco Jalle, subrayó que "no ha habido tal tregua" y recordó que "hubo un atentado tremendo en la T-4 de Barajas " que el 30 de diciembre de 2006 costó la vida a dos ciudadanos ecuatorianos. Además, "han seguido las extorsiones y las amenazas a empresarios" y ha proseguido "el terrorismo callejero".

El comunicado hecho público hoy es una muestra del "cinismo" de la banda armada, continuó Marco Jalle, quien confió en que "se vuelva a conseguir un consenso entre los grandes partidos y que el Gobierno ataque con todos los medios a su alcance y persiga el final del terrorismo. Es lo que anhelamos".

Por último, el portavoz de la Iniciativa Ciudadana Convive, Sergio Remón, consideró "poco sorprendente" el contenido del comunicado de ETA porque "además de matar en Madrid, ha estado extorsionando, recopilando dinero y haciendo terrorismo callejero", es decir, que "el alto el fuego ya estaba roto el 30 de diciembre" pasado, cuando ETA perpetró el atentado de la terminal T-4.