Confebask cree que la caída en la industria es "transitoria" y augura que el empleo del sector crecerá tras el verano

El presidente de Confebask, Miguel Ángel Lujua, ha afirmado que la caída en la producción industrial es "transitoria" y causada por "factores puntuales"y ha augurado que el empleo en el sector crecerá en términos interanuales "después del verano".
Miguel Ángel Lujua, presidente de Confebask
Miguel Ángel Lujua, presidente de Confebask
EUROPA PRESS
Miguel Ángel Lujua, presidente de Confebask

El presidente de Confebask, Miguel Ángel Lujua, ha afirmado que la caída en la producción industrial es "transitoria" y causada por "factores puntuales"y ha augurado que el empleo en el sector crecerá en términos interanuales "después del verano".

En un artículo en su blog, el responsable de la patronal vasca ha analizado de este modo los últimos datos sobre la evolución de la industria vasca, que "parecen haber generado cierta inquietud al romperse la progresiva dinámica de recuperación que venía observando la producción industrial y no terminar de remontar el empleo del sector".

"Una inquietud que parece igualmente alimentar la comparativa con el alza que, por oposición, vienen experimentando ambas variables en el ámbito estatal", añade.

Por su parte, Lujua reconoce que, frente al resto de sectores de la economía, la mejora de la producción industrial vasca "se viene ralentizando desde finales de 2014, haciendo una pausa en el ritmo de recuperación que inició a partir del tercer trimestre de 2012", y que "le está costando algo más reactivar el empleo".

No obstante, indica, es necesario "interpretar la evolución global", que "en líneas generales evidencia una tendencia favorable".

El presidente de Confebask recuerda que la industria es un sector "muy interrelacionado" con la evolución general de las diferentes economías mundiales y "tardan más" en producirse cambios que en otros sectores. "Lo mismo ocurre con el empleo que éste genera, un empleo habitualmente más resistente cuando llega la crisis, pero al que también le cuesta más reactivarse cuando se inician los primeros compases de la recuperación", señala.

De este modo, considera que la bajada del 1,8% experimentada por el IPI (índice de Producción Industrial) interanual de febrero no implica que la industria vasca "vaya mal" o que "se ciernan sobre ella negros nubarrones".

Según indica, "no va mal" porque "la caída parece ser transitoria y causada por factores puntuales" y, además, porque "las perspectivas siguen siendo buenas". De esta manera, resalta que "continúan mejorando los índices de confianza del sector en todas sus variables y los datos que sobre pedidos y perspectivas así lo atestiguan".

A estos factores, añade, se suma "el viento a favor" de la mejoría iniciada por la economía europea y el efecto positivo del descenso del precio del petróleo, el tipo de cambio euro/dólar, el inicio de la reactivación del crédito en Europa por la política del BCE, el "repunte" de la inversión europea y "nuestro creciente atractivo" para la inversión extranjera.

A su entender, en la medida en que todos estos factores se consoliden, "asistiremos en buena lógica a la mejora del empleo en el sector". Tras recordar que "se registra ya avance en el nivel de afiliación" a la Seguridad Social, Confebask prevé que, "después del verano, podremos ya contemplar como el empleo industrial crece en términos interanuales".

"umbral más alto"

En materia de empleo, destaca que no se debe "pasar por alto" que el grado de destrucción de puestos de trabajo experimentado por la industria vasca durante esta crisis ha sido menor que en otras comunidades, "apostando más las empresas por medidas de flexibilidad y ERE de suspensión que de despido", y que, por otra parte, la tasa de paro es inferior, por lo que hay "un umbral más alto del que partir".

Finalmente, cita "otro dato más a favor" de unas mejores expectativas industriales vascas, el hecho de que "el nuevo modelo económico internacional se encuentra cada vez más volcado en la producción de bienes y servicios dentro de un mercado más global y exigente, pero también con mayores posibilidades y nichos de negocio al incorporarse al mismo cada vez más consumidores, muchos de ellos con medio y alto poder adquisitivo".

Para Lujua, "a pesar de los retrocesos puntuales o de las incertidumbres que sin duda también existen y aun mirando con la lógica prudencia el devenir de una economía que ha sufrido una crisis tan grave y larga, perdiendo músculo empresarial e industrial, lo cierto es que el horizonte parece cada día un poco más despejado y que paso a paso, con más o menos velocidad de crucero, estamos consolidando en el día a día el inicio de la ansiada recuperación". "También la industrial", concluye.

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