Hillary Clinton anunció este domingo su candidatura para ser la representante demócrata para ocupar la Casa Blanca cuando salga Obama (2016) y, casi al instante o incluso antes, los republicanos tocaron a rebato y comenzó la carga de caballería contra el ex primera dama y ex secretaria de Estado (similar al ministro de Asuntos Exteriores europeo).

Los republicanos podrán estar divididos en las primarias, con varios candidatos ya anunciados y otros rumoreados, pero todos tienen más que claro que su principal rival son los democrátas y sobre todo Clinton, que aspira a convertirse en la primera mujer que preside los EE UU.

Los republicanos han sacado todo su arsenal contra Clinton recordando el ataque a la consulado en Bengasi, Libia, —en el que falleció el embajador de EE UU— su política exterior, el escándalo de los correos electrónicos oficiales enviados desde su cuenta personal, el supuesto dinero cobrado de gobiernos extranjeros o su identificación con las políticas de Barack Obama (a pesar de sus múltiples diferencias).

Poco después de su anuncio, la página web del Comité Nacional Republicano (CNR) ha publicado una foto en su portada con una foto de Clinton junto a una señal que reza 'Stop Hillary'. Además, a lo largo de la jornada se han sucedido los mensajes, vídeos y comentarios en las redes sociales en los que se critica su carrera.

El CNR acusó a Hillary Clinton de dejar detrás de sí "un rastro secretos, escándalos y políticas fracasadas", y dijo que su candidatura presidencial representa "más de lo mismo". "Los estadounidenses necesitan un presidente en el que puedan confiar, y los votantes no confían en Hillary Clinton", afirmó en un comunicado el presidente de ese órgano rector del Partido Republicano, Reince Priebus.

Por su parte, uno de los futuribles candidatos republicanos, el exgobernador de Florida Jed Bush -hijo y hermano de presidentes- afirmó a través de Twitter: "Debemos hacerlo mejor que Hillary". En un vídeo, Bush acentúa la necesidad de mejorar "la política exterior que ha dañado relaciones con aliados y ha alentado a los enemigos", en relación a las decisiones de Clinton en su época de secretario de Estado.

Rand Paul, candidato oficial este sí, ha lanzado otro vídeo en que el también utiliza a Clinton como saco de boxeo. Asegura que supone "la peor máquina de Washintgon, arrogancia, corrupción y conflictos de interés. Además, ya ha comenzado a comercializar productos estampados con la frase "libertad, no Hillary" (que inglés rima como "Liberty, not Hillary").

Otro candidato oficial, Ted Cruz, ha preferido fijarse en la relación de Clinton con Obama, su ex jefe. En un comunicado, Cruz asegura que el objetivo de Clinto es ofrecer al actual presidente, Barak Obama, un tercer mandato.

"Sabemos que una administración Hillary Clinton no sería muy diferente de la Administración Obama. El 'Obamacare', la amnistía, y el actual asalto a nuestros derechos continuarán", ha advertido Cruz. "Clinton representa las políticas fallidas del pasado", asegura el candidato republicano.