Impulso de la medicina personalizada, resultados en salud, optimización de recursos económicos y eficiencia del sistema sanitario e integración de los procesos hospitalarios son solo algunos de los beneficios que aporta la implantación del diagnóstico in vitro de forma integral y generalizada.

"Para ello, existen algunas barreras que hay que superar, como el hecho de que la implementación de los procesos por diagnóstico in vitro no sea la forma habitual de proceder y requiera de cambios organizativos y la necesidad de ver esta innovación como inversión y no como gasto", explica el director Gerente de los Hospitales Universitarios Virgen Macarena-Virgen del Rocío de Sevilla, Manuel González Suárez, en el marco del III Forum Roche In Vitro Diagnostics que, bajo el título 'El poder de saber', se celebra este jueves y viernes en Sevilla.

Además, según una nota de prensa, González Suárez destaca que la evidencia proviene "del conocimiento científico y de los profesionales sanitarios y no de la dirección de los centros, lo que supone también una barrera para el cambio de la organización".

Precisamente, el análisis del impacto de la tecnología del diagnóstico in vitro en la salud y en la eficiencia clínica, así como los últimos avances en este ámbito, son los objetivos principales del III Forum Roche In Vitro Diagnostics, en el que se están dando cita más de un centenar de gestores sanitarios de todo el país.

En palabras del Consejero Delegado de Roche Diagnostics en España, Jaime Vives, "nuestro compromiso con la innovación en el área del diagnóstico in vitro va más allá del desarrollo de soluciones, de forma que nuestra labor diaria pasa no solo por acercar el laboratorio a los pacientes y aportarles resultados en salud, sino también por colaborar con la administración y los profesionales de la gestión sanitaria en la sostenibilidad del sistema".

De este compromiso parte la celebración de este Foro anual, "como punto de encuentro de clínicos, profesionales de laboratorio y directivos de la salud, en el que poner en común experiencias, proyectos que han demostrado evidencia, analizarlos y debatir sobre las vías más óptimas de implementación", añade.

En este marco, los expertos reunidos han coincidido en la necesidad de implantar los procesos relacionados con diagnóstico in vitro de forma integral y generalizada, teniendo en cuenta que, en la actualidad, siete de cada 10 decisiones clínicas están determinadas por pruebas de diagnóstico in vitro y "pasando de la realización de proyectos pilotos a la implementación generalizada, sin fragmentación por procesos o especialidades médicas, dentro de la cultura del hospital y atendiendo a la medicina basada en la evidencia", explica el director Gerente del Hospital Universitario Marqués de Valdecilla de Santander y vicepresidente de la Sociedad Española de Directivos de la Salud (Sedisa), César Pascual.

Para ello, una de las claves es la evaluación continuada y publicación de resultados, "para lo que también necesitamos definir, consensuar y poner en común los indicadores que debemos tener en cuenta para evaluar y tomar decisiones", argumenta González Suárez.

Durante el III Forum Roche In Vitro Diagnostics, se tratarán los temas más relevantes en esta área en la actualidad, tales como el impacto de los biomarcadores en el manejo del paciente con insuficiencia cardiaca, el impacto de la GERH en el manejo de la infección nosocomial, el subtipado de alta resolución del virus de la hepatitis C, los avances en anatomía patológica, la automatización en virología y el futuro que deparará la medicina genómica, la gestión de biobancos.

Cambio de modelo organizativo

Dado que la implementación del diagnóstico in vitro puede romper los circuitos habituales de detección de patologías, de entrada a consultas, etcétera y que requiere de un trabajo coordinado, colaborativo, integral e integrado en los procesos asistenciales de los centros hospitalarios, la necesidad de un cambio en el modelo organizativo en éstos es evidente.

Según el Director Gerente de los Hospitales Universitarios Virgen Macarena-Virgen del Rocío de Sevilla, "existen cuatro dimensiones del conocimiento de las organizaciones: el qué hacemos, cómo, por qué lo hacemos y el interés colectivo de que esto sea así. Mientras las tres primeras dimensiones dependen de las personas que forman parte de la organización, la última depende de ésta, que es responsable de establecer los retos y evaluación para que el resto de dimensiones funcionen".

El cambio en el modelo organizativo debe superar algunos retos del diagnóstico in vitro, tales como "poder determinar ahorros a corto plazo, dado que los presupuestos que se manejan en la gerencia de los centros hospitalarios son anuales, cambiar el modelo organizativo con implicación de los clínicos, eliminar barreras de publicación e intercambio de datos por parte de los hospitales y establecer alianzas estratégicas con compañías del sector de la tecnología sanitaria, para aportar la sostenibilidad necesaria que nos exige el sistema", explica César Pascual.

En esta evolución, los productos pasan a concebirse como servicios, los parámetros pasan a ser soluciones integrales y el proveedor deja de serlo para convertirse en partner. "Se trata de compartir riesgos, pero también objetivos en la incorporación de aquellas innovaciones que aportan calidad, eficiencia y sostenibilidad", concluye González Suárez.