Ocho de cada diez conductores encuestados reconoce haber sufrido somnolencia cuando estaba conduciendo, lo que constituye uno de los principales riesgos al volante. En estas situaciones, el 44% de los encuestados afirma que tomar una bebida refrescante y estirarse adecuadamente les ha ayudado a despejarse.

Situaciones extremas

20minutos, junto a otros medios de comunicación, pudo comprobar de primera mano los efectos de la fatiga en la carretera al ser partícipe del Estudio de la conducción y la fatiga organizado en Marruecos y cuyas conclusiones se conocerán a finales de junio.

En Ouarzazate, una ciudad desértica situada al sureste de Marrakech, calurosa, seca y llena de caminos de tierra y polvo tuvimos la oportunidad de experimentar las distintas pruebas (subjetivas, médicas y psicotécnicas) de percepción, tiempos de decisión y atención que demostraron cómo a lo largo del día nos vamos cansando y nuestro estado físico y psicológico no es el mismo que cuando nos subimos en el coche.  Condujimos un todoterrenos y recorrimos pistas como una del Rally París-Dakar, muy cerca del monte Atlas.

Tras conducir durante un día entero por el país de las kasbahs, los kilómetros recorridos al sol demostraron que la fatiga y la deshidratación  provocaron fallos en  la concentración, aumentó nuestro tiempo de reacción ante un imprevisto y desvirtuó la sensación de velocidad.

Consejos para evitar la fatiga

Dormir bien: Hay que procurar descansar lo suficiente antes de emprender un viaje largo.

Hidratación: La deshidratación provoca que se reduzca la atención. Por eso, hay que tomar bebidas refrescantes sin alcohol.

Estiramientos: Es conveniente descansar cada 200 km y estirar el cuello, los brazos, los abdominales y las piernas para relajarlos.

Ajustes: Hay que regular bien el asiento, el reposacabezas y el cinturón.

M. García concienciará a conductores

«Espero que viéndome se den cuenta de que es mejor no beber»

La DGT quiere que personas como Montse García sean la cara de la nueva campaña contra el alcohol en carretera e informen de los riesgos de beber al volante. De las cuatro personas que iban en su coche, sólo ella se quedó parapléjica, aunque no conducía.

¿Ayudará su testimonio a salvar vidas?

Sí. A lo mejor la gente piensa que nunca le puede pasar, pero pasa. Yo soy la prueba.

Seguro que no es fácil acostumbrarse a su lesión.

Yo no necesité atención psicológica, pero sí aprender de nuevo. A moverme, a vivir (cambié de piso). Paradójicamente, a raíz del accidente aprendí a conducir. No podría utilizar el transporte público.

¿Funcionan las campañas de la DGT?

Algunas son muy duras, pero todas buscan evitar las muertes, y a la gente le llaman la atención. Yo creo que lo importante es educar, desde el colegio.

¿Qué pensarán los conductores cuando la vean?

A lo mejor se asustan. Yo sólo espero que viéndome a mí, no a un vídeo o una campaña en los medios, se den cuenta de que es mejor no beber nada si tienes que coger un coche.

Se ha intentado todo, pero los accidentes siguen.

Tenemos que hacer entender que si hay dinero para beber, también lo hay para un taxi o un autobús.

¿Qué piensa de lo que dijo Aznar del vino?

No ayuda en nada.