El veneno de la temida araña chilena "viuda negra" o también conocida como “araña del trigo”, que en el mejor de los casos produce una prolongada y dolorosa erección del pene, y en el peor, la muerte, esta a punto de convertirse en un revolucionario espermicida que podría inhibir la fecundación humana.

Un grupo de científicos, liderados por el médico chileno Fernando Romero, descubrió una estructura molecular en el veneno de este arácnido, que puede actuar como espermicida.

Un estudio basado en historias campesinas

El veneno de la araña, "que es un cóctel de moléculas capaz de atacar distintos órganos, encontramos una estructura molecular con importantes funciones para ser un espermicida natural, es decir, inhibir la capacidad de fecundación de un espermatozoide", dijo Romero.

De ser cierto, sería una alternativa más efectiva frente a los actuales espermicidas que han demostrado ser parcialmente eficientes, lo que contribuiría a un mejor control sexual y natal.

"Desde hace varios años, la FDA (Administración de Alimentos y Fármacos de Estados Unidos) no tiene autorizado un espermicida adicionado a los preservativos, que antes era el nonoxinol-9, para ser complemento de la capacidad antifecundante", dijo Romero en una entrevista.

El científico agregó que esto supone una gran oportunidad de mercado para chile, ya que en estos momentos no hay espermicidas de origen natural que tengan la propiedad de la estructura molecular descubierta.

Los efectos de la picadura

El veneno de la “viuda negra” es cincuenta veces más potente que el de una cobra. Este hallazgo viene impulsado a raíz de las historias de los campesinos que habían sufrido la picadura del arácnido.

Estos contaban que les producían taquicardias, aumento de la fuerza y la vitalidad junto a una erección involuntaria del pene por varios días e inhibición temporal de la concepción masculina.

La mordida de esta famosa araña ha dado paso al tradicional dicho campesino en Chile "picado de la araña", en alusión a los hombres sexualmente muy activos, aunque la realidad es distinta, pues la araña macho tras copular es devorada por la hembra. De ahí su nombre, "viuda negra".

El estudio se inició para detectar en el veneno un antídoto para la disfunción eréctil o potenciador sexual, el que se encuentra en la fase de trámite de patente. Pero la investigación arrojó además el descubrimiento de una molécula capaz de inmovilizar a los espermatozoides.