El Grupo Popular ha apoyado en solitario este martes en la Cámara gallega la toma en consideración de una proposición de ley de iniciativa legislativa popular (ILP) y de participación ciudadana en la que incluye novedades como la posibilidad de que colectivos o asociaciones de ciudadanos puedan presentar para su tramitación iniciativas de impulso si reúnen 2.500 firmas y algún grupo las asume para su defensa.

Un texto sobre el que todos los grupos de la oposición -PSdeG, AGE, BNG y Grupo Mixto— han cargado en sus intervenciones al considerarlo "fuegos de artificio" y "propaganda". Según ha expuesto el diputado de Alternativa Ramón Vázquez, el PPdeG dice que es una ley de participación ciudadana, pero según figura en la web del Parlamento esta proposición cuenta con "cero aportaciones" de los gallegos. "Ese es el núcleo de la cuestión", ha apostillado.

Así las cosas, el portavoz parlamentario del PPdeG, Pedro Puy, ha subrayado que este texto "tiene claramente un objetivo", que ha identificado con "perfeccionar" los instrumentos de la democracia representativa, con el fin de "abrir nuevos canales" de participación directa de la ciudadanía.

De tal forma, defiende que esta proposición de ley "trata de beneficiar" a la Cámara y al conjunto de la ciudadanía, al tiempo que ha señalado que el Parlamento gallego es "particularmente receptivo" a las iniciativas legislativas populares, puesto que desde 2009 se han presentado 12 y se han aprobado cuatro.

Novedades para "un impulso democrático"

El texto que ha comenzado su trámite parlamentario este martes se suma a la reforma de la ley que regula las iniciativas legislativas populares (ILP), aprobada en 2014, para llegar a una única norma de participación ciudadana, que "abre la puerta" a que los gallegos lleven a "la agenda" del Parlamento qué cuestiones debatir, según Puy.

Entre las novedades, los populares destacan la posibilidad, hasta ahora inexistente en España, de que los gallegos puedan hacer llegar proposiciones no de ley (iniciativas de impulso) a la Cámara autonómica.

Los mecanismos para hacerlo posible serán similares a los de una ILP, aunque el número de firmas será inferior, puesto que bastará con 2.500 signaturas frente a las 10.000 necesarias para una iniciativa legislativa popular. Para su tramitación, será necesario que los grupos hagan "suya" la iniciativa, puesto que decaería si esto no ocurre. Del mismo modo, los ciudadanos también podrán dirigir preguntas al Gobierno que, de nuevo, podrán asumir los grupos para su tramitación.

Los populares también aspiran a favorecer la aportación de los ciudadanos en la tramitación de los textos legislativos que impulse el Gobierno, así como en los que nazcan desde los grupos parlamentarios. Para esto, se potenciará la participación por vía electrónica a través de la web del Parlamento. Todo ello, conforme a lo comprometido por el presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo, en el último Debate sobre el Estado de la Autonomía.

Por todo ello, Puy ha apuntado que se presenta esta proposición de ley, que este martes se ha admitido a trámite tras los votos de los populares, "con la mejor de las intenciones" en pro de un "impulso democrático".

"síndrome de fortaleza asediada"

El portavoz parlamentario del PSdeG, José Luis Méndez Romeu, ha arremetido contra una proposición "modesta y débil", así como "tramposa y vacía de contenido", de la que ha dicho "no entender" cómo "no fue objeto de censura de la asistencia letrada del parlamento" en lo que considera "violencia sobre el reglamento en la Cámara".

De hecho, cree que este texto supone de facto "derogar" la reforma de la ley que regula las ILP, pues considera que los populares no se dieron cuenta de "las taras" de una norma "que aprobaron hace cuatro meses", por lo que ahora "añaden un coda".

Al respecto, censura que esos "nuevos canales" de participación de los ciudadanos van a depender de la "libérrima" decisión de los grupos de defenderlas, unido a la "inseguridad jurídica que están provocando".

En esta línea, Méndez Romeu lamenta que los populares están "instalados en la propaganda", y para ello "acuden a un trampantojo" como esta ley que para el socialista revela el "síndrome de fortaleza asediada" que se vive en el Parlamento gallego. Así, critica que los populares "quieren que la gente sea invisible", ya que evitan que los ciudadanos presenten sus iniciativas "cara a cara" e "impidiendo que los temas de actualidad se traten aquí".

Recorte de cupo de iniciativas de grupos

Por su parte, el portavoz del BNG, Francisco Jorquera, ha bromeado "con tal decidido impulso a la participación democrática" realizado por los populares, pues igual es "excesivamente libertino". "No sé si se pasarían ustedes de frenada", ha ironizado.

Así, ha censurado que la propuesta del PP es que los ciudadanos puedan presentar iniciativas pero "ni siquiera contemplan" que se debatan de forma "obligatoria", pues deberán ser los grupos los que decidan si las aceptan o no. Además, ha avisado de que se llevarán a cabo "a cargo del cupo de iniciativas de ese grupo", y ha recordado que "ya se han recortado" a AGE y BNG.

"¡Qué impulso democrático tan decidido!", ha clamado Jorquera. "De tanto impulso no sé si acabarán 'enfouciñando" (dándose en los morros), ha espetado, sobre una medida que considera "fuego de artificio, propaganda y vacía de contenido". Por eso, pide que los ciudadanos puedan intervenir "sin cortapizzas", ya que cuando se están "conculcando" los derechos de los grupos "están conculcando los derechos de sus representados".

De este modo, reprocha que los populares "dicen apostar por reforzar la centralidad política de este parlamento", mientras que: se expulsa a la diputada del BNG Carme Adán por buscar "ejercer un derecho reconocido en el reglamento"; al tiempo que el presidente de la Xunta "se niega a comparecer" sobre corrupción; "tienen secuestrada la comisión de las cajas"; "vetan" que se pueda abrir una comisión de investigación de Angrois; y hay "una ley mordaza" al BNG para que no pueda preguntarle al presidente.

Por parte del Grupo Mixto, Consuelo Martínez ha censurado que las instituciones gallegas funcionen como "diques contra la participación ciudadana" y Carmen Iglesias critica que "de 27" ILP presentadas, "sólo fueron aprobadas cuatro".

"antítesis de la participación"

Asimismo, Ramón Vázquez (AGE) ha identificado este texto con un modelo de "timocracia", en la que se presenta "leyes de hermoso nombre" pero que "no aportan nada nuevo".

Una ley que cree que "es la antítesis de la participación", con un Parlamento "reducido a simple ritual democrático", mientras que no hay "nada" que garantice" que una pregunta sea contestada. "Publicidad y propaganda", resume, y acusa a los populares de ver la participación como una "impostura".

Por ello, Vázquez ha recriminado a los populares "seguir permitiendo que las élites" tomen las decisiones sin la participación ciudadana, con una ley que "se parece más a una tomadura de pelo generalizada".

"tan de la élite como nosotros"

Como réplica a esta cuestión, Pedro Puy le ha espetado a Vázquez que por su condición de diputado: "Usted sea tan de la élite como seamos nosotros".

Junto a esto, el portavoz del PPdeG ha reprochado a la oposición que "parece que les molesta" que sean los populares los que "toman la iniciativa de abrir la Cámara a la participación". "No quieren que la ciudadanía venga a esta Cámara", ha finalizado.