La Audiencia Provincial de Palma ha condenado a dos policías nacionales a tres años de cárcel y a nueve de inhabilitación, por un delito de torturas y una falta de lesiones por maltratar uno de ellos a un detenido y el otro presenciar los hechos sin evitarlos.

Tal y como considera probado la sentencia de la Sección Primera, los hechos sucedieron en agosto de 2009 en el aparcamiento de la Jefatura Superior de Policía de Palma, tras una pelea en la que se habían visto implicados policías nacionales que no estaban de servicio.

Uno de ellos, el inspector del Grupo Operativo de Motos, Víctor G.F., acudió después del incidente a la comisaría, donde comenzó a maltratar a un arrestado, golpeándole, insultándole y encañonándole con una pistola simulando una ejecución.

El segundo policía, Javier Joaquín A.B., ha sido condenado por un delito de torturas graves omisivas, puesto que estuvo presente en la agresión. A ambos se les aplica la circunstancia atenuante de reparación del daño.