El invierno (diciembre, enero y febrero) ha sido más frío de lo normal, con una temperatura media de 7,4 grados, 0,6 grados por debajo de la media, y la primavera, que entra este viernes 20 de marzo a las 23.45 horas (hora peninsular) será más cálida de lo normal, con unos valores que podrían alcanzar temperaturas superiores a la media del periodo comprendido entre 1981 y 2010 en la mitad oriental peninsular y Baleares.

Así lo ha adelantado este miércoles, la portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), Ana Casals. Aunque "aún es pronto" para vaticinar cómo será la Semana Santa en España, Casals ha especificado que para el trimestre de abril, mayo y junio es muy probable que las precipitaciones sean "ligeramente inferiores" a la media de la Península y Baleares, mientras que en Canarias no se esperan diferencias significativas con respecto a la climatología del periodo 1981-2010.

Por otro lado, respecto al invierno, ha indicado que ha sido "frío en general", con una temperatura media de 7,4 grados, que se sitúa un 0,6 grados por debajo del valor medio. De todos los meses del invierno, febrero ha sido el más gélido, con un valor medio de -11 grados, mientras en diciembre y enero registraron anomalías de 0,2 grados y 0,3 grados, respectivamente.

En febrero, los valores quedaron por debajo de lo normal siendo las anomalías más negativas (superiores a 2 grados) las que se registraron en País Vasco, nordeste de Castilla y León, este de Andalucía, sureste de Castillla-La Mancha y en las zonas altas de sistemas montañosos. En Baleares, el mes fue frío con anomalías superiores a un grado y Canarias también frío, con una anomalía media de -1 grado.

Las temperaturas mínimas más bajas del trimestre se registraron en los últimos días de diciembre y en la primera decena de enero, siendo el valor mínimo el que se alcanzó en Molina de Aragón, con -11,9 grados el pasado 8 de febrero, seguida del Puerto de Navacerrada, con -10,3 grados el pasado 29 de diciembre. En capitales de provincia, destacan Burgos-aeropuerto de Villafría (-9,3 grados, el 10 de febrero), Teruel (-8,3 grados, el 8 de febrero) y Soria (-8,2 grados, el 8 de febrero).

Por el contrario, las temperaturas más elevadas se registraron en el Observatorio de Tenerife-Aeropuerto Reina Sofia, con 27,1 grados y el aeropuerto de Palma, con 26,1 grados el 25 de diciembre. En la Península, los valores máximos se alcanzaron en Murcia (25,5 grados) y Murcia Alcantarilla (25,2 grados) el 30 de enero. También se registraron temperaturas que rondaron los 25 grados en la Región de Murcia y litoral de Valencia en los últimos días de febrero.

En cuanto a las precipitaciones, ha subrayado que el invierno ha sido seco en general aunque "extremadamente desigual" ya que hay regiones en las que ha sido extremadamente húmedo. Así, se han superado los valores normales en la franja cantábrica, desde el nordeste de Galicia al País Vasco, así como en Navarra, La Rioja, Norte de Castilla y León, islas de Mallorca y Menorca y áreas reducidas del Sistema Central y de las Sierras del nordeste de Andalucía y norte de la Región de Murcia.

Por el contrario, en otras zonas ha sido seco, sobre todo en el oeste y nordeste peninsulares así como en Canarias, mientras que no han llegado al 50% del valor normal en Extremadura, Andalucía occidental, provincias de Salamanca, Zamora y Valladolid, así como en zonas costeras de Murcia y norte de Valencia.

La precipitación media ha sido de 150 mm, un 24% por debajo de la media del trimestre. Enero fue casi normal en precipitaciones, con una media un 10% por debajo de lo normal y en febrero se mantienen el valor normal.

En este punto, Casals ha citado las precipitaciones "muy copiosas" que se registraron en el País Vasco (27 de diciembre), en el sur de Andalucía (18 de enero), en el norte peninsular y zonas montañosas del centro entre los días 29 y 31 de enero y los diversos episodios que a lo largo de febrero se produjeron en el norte, frecuentemente de nieve en cotas bajas, sobre todo el de los días 23 y 26 en el País Vasco, norte de Navarra, Cantabria y norte de Aragón.

El valor máximo de precipitación diaria acumulado entre observatorios principales en el trimestre correspondió al Puerto de Navacerrada (127,3 mm, el 30 de enero), seguido de Rota (89,4 mm, el 18 de enero) y Hondarribia (84,3 mm, el 27 de diciembre).

La distribución geográfica "extremadamente desigual" de las precipitaciones también se refleja en el año hidrológico -el periodo comprendido entre el 1 de octubre de 2014 y 10 de marzo de 2015-, que se sitúa en los 347 mm, un 6% por debajo de la media. Así, el año está resultando especialmente húmedo en Cantabria, País Vasco, La Rioja, Navarra, este de Asturias y norte de las provincias de Palencia, Burgos y Zaragoza, donde las precipitaciones superan a las normales en más del 50%.

Por el contrario, en el suroeste de Castilla y León, en el oeste y norte de Extremadura y en amplias áreas de Cataluña y del centro y este de Andalucía, así como en las zonas del litoral de las comunidades de Murcia y Valencia, las precipitaciones quedan por debajo del 75% del valor normal, y no alcanzan el 50% de dicho valor en una pequeña área que abarca la costa de Murcia y el este de la provincia de Almería.

Casals también ha señalado que la primera parte del mes de marzo (del 1 al 10 de este mes) ha sido relativamente cálida en casi toda España, con valores que han superado el promedio de dos grados para este periodo, a excepción de Baleares, donde se han registrado temperaturas ligeramente por debajo de lo normal. Las precipitaciones de este periodo han sido muy escasas, aunque ha habido precipitaciones significativas en el norte y oeste de Galicia.