El presidente del Partido de los Trabajadores (PT) de Brasil, Rui Falcão, defendió la inocencia del tesorero de la formación, João Vaccari, por su imputación en el caso de corrupción en la petrolera Petrobras y aseguró que lo mantendrá en su cargo.

Falcão afirmó en una rueda de prensa que no ha recibido "ningún pedido" dentro del partido para apartar a Vaccari de sus funciones y aseguró que el propio tesorero tampoco le ha comunicado que pretenda dejar su puesto voluntariamente.

"Cualquier denuncia presupone que las personas son inocentes hasta que se pruebe lo contrario", recalcó el presidente del PT, formación de la mandataria brasileña, Dilma Rousseff.

El dirigente del PT dijo que "si se comprueba" que cualquier afiliado cometió algo "ilícito" se le castigará "de acuerdo a las normas del partido".

La Fiscalía brasileña denunció este lunes a Vaccari por delitos de corrupción, lavado de dinero y asociación ilícita por su implicación en el vasto caso de corrupción investigado en la petrolera estatal.

De acuerdo con la Fiscalía, Vaccari mantenía encuentros regulares con un director de Petrobras supuestamente para convertir en donaciones legales de campaña al PT el dinero sucio producto del pago de sobornos a directores de la petrolera por parte de constructoras.

El fiscal Deltan Dallagnol, quien presentó la denuncia, afirmó que Vaccari "sabía" que las donaciones que recibía el partido procedían de "coimas".

Falcão defendió la inocencia del tesorero, afirmó que todas las donaciones que el partido recibió son "legales" y recordó que el Tribunal Superior Electoral aprobó las cuentas de campaña del PT.

La denuncia de Vaccari ocurrió un día después de las manifestaciones multitudinarias celebradas en decenas de ciudades del país contra la corrupción y en contra del Gobierno de Rousseff.

La denuncia presentada este lunes por la Fiscalía sumó un nuevo capítulo al gigantesco escándalo de corrupción destapado hace un año, que se refiere al amaño de contratos de Petrobras con constructoras y proveedoras y el reparto de los fondos excedentes entre políticos y partidos.

A lo largo de las investigaciones, la policía arrestó a cinco ex altos cargos de Petrobras, dos de los cuales se confesaron culpables, y una decena de directivos de las mayores constructoras de Brasil, y ha imputado a cerca de 50 políticos.