Los médicos que la atendieron pensaban que padecía un tumor de hígado, hasta que una ecografía reveló que no era así, sino que se trataba de un feto calcificado de 59 años, de 1,5 kilos y 20 centímetros de largo, que ya ha sido extirpado, y que puede ser hermano de la mujer que no llegó a nacer, según ha explicado el director del hospital.

 

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No es el primer suceso de estas características que se conoce. En 2002 se descubrió en Marruecos a una mujer que llevó 46 años dentro a un feto de 3,5 kilos; y en Cuba, a una anciana que vivió más de 40 años con otro. En China, se extrajo en 2000 a un feto del abdomen de un hombre de 28 años, y en Egipto nació hace diez meses un bebé con un feto en sus entrañas.