O mejor dicho, el que durante ocho años los había bautizado y absuelto de sus pecados. José Luis Torres ha arrasado en estas elecciones. Su lista, integrada por cinco mujeres, entre ellas la peluquera, ha obtenido nueve de los 11 concejales y se ha quedado a tan sólo diez votos de conseguir los diez.

Ya sin sotana y exultante por su victoria, este hombre de 36 años relata con mesura que ha sido el primer cura en dejar los hábitos para dedicarse a la política y ser alcalde. "Ha habido sacerdotes que lo han dejado para casarse, pero según las estadística soy el único que lo ha hecho por la política".

¿Piensa en un futuro dejar la Alcaldía para casarse?

No, de momento no. Ahora lo único que me mueve es trabajar por mi pueblo e intentar no defraudarlo.

¿Y qué le han dicho en la institución religiosa?

Cuando un sacerdote tiene cualidades, es normal que no quieran desprenderse de él. Aunque no compartían mi decisión, la respetaron... Igual que he sido un buen cura, puedo ser un buen alcalde.

¿Cómo va a conjugar esos dos amores?

Yo sigo siendo sacerdote, lo que pasa es que no ejerzo el ministerio sacerdotal; pero cuando lo crea conveniente, puedo volver.

¿Cuándo sintió que tenía dotes de alcalde?

Yo he intentado ser un cura del pueblo y ahora pretendo ser un alcalde de todos y ayudar a la máxima personas posible: ser alcalde para los que me han votado y para los que no. Yo ni siquiera había pensando presentarme a las elecciones.

A mí me lo han propuesto casi todos los partidos y llevan bastante tiempo en ello. Y lo decidí ahora porque creía que podía llegar a más gente que como cura y podía tener más medios para hacer cosas.

¿Y por qué el PP?

La política es noble y buena y eso no quita que haya políticos que se sirvan para su lucro personal y sus intereses. No hay ningún partido perfecto, pero sopesando la balanza el PP reúne una serie de cualidades y motivaciones y confianza en el futuro. Y a Cómpeta lo que le hace falta es un partido que apueste por el futuro.

Pero el PP ha gobernado con mayoría absoluta los últimos 16 años...¿El anterior alcalde se fue por su propio pie?

Nos ha cedido el paso. Él ha estado 28 años de alcalde y le pareció bien que encabezáramos la lista. Somos un equipo nuevo, hemos sacado de 11 nueve concejales y nos han faltado diez votos para los diez. Toda la lista es nueva, hay cinco mujeres: juventud, madres de familia, trabajadoras y como anécdota hay una peluquera. La gente tenía ganas de cambiar y nuestro grupo se lo ha ofrecido y han apostado por él.

¿Qué les va a ofrecer?

Hay muchas cosas que Cómpeta demanda en el ámbito de las infraestructuras: un teatro, una oficina de Correos, un centro de salud. En el ámbito de los servicios hay muchas necesidades, también en el turismo y la agricultura y el medio ambiente. Recordemos que Cómpeta es el paraíso del vino.

¿Se ve los cuatro años enteros de alcalde?

Ellos han puesto su confianza en mí para cuatro años y espero no defraudar.

Es que tal vez le tire más su anterior profesión...

Una persona tiene que tener los pies en el suelo. Y cuando da un paso no puede mirar atrás. Cuando cumpla mi cometido durante estos cuatro años, reflexionaré y pensaré si tengo que continuar, volver a lo mío o, por el contrario, Dios me ha abierto otro camino.

¿Cuál será su primera medida?

Muchas cosas me gustaría arreglar.

Le van extrañar los otros tres pueblos donde usted era el cura...

Sí, el domingo daba misa en los cuatro pueblos: Canillas del Albaida, Árchez, Corumbela y Cómpeta haciendo un croqui de horarios: la pastoral de la carretera. Pero eso lo hacen muchos curas y es un trabajo que no se tiene en cuenta. También fui profesor de Teología en un colegio público.

¿Tiene alguna afición confesable?

Salgo a correr todos los días a las seis de la mañana. Me gusta sobre todo el deporte, viajar.

¿El fútbol?

Fútbol, baloncesto...

¿Del Madrid?

Prefiero reservármelo por respeto a los demás.