El coordinador regional de IULV-CA y candidato a la Presidencia de la Junta de Andalucía, Antonio Maíllo, ha propuesto este jueves en Almería la aprobación de una Ley de Fiscalidad Ecológica para "prevenir actuaciones que provoquen la contaminación o el deterioro medioambiental" con el establecimiento de un gravamen incumplimiento de normas con el fin de que "quien contamine, pague", y ha defendido la soberanía energética y la promoción de las energías renovables.

En un acto público en Almería, acompañado por la número uno al Parlamento por la provincia, Rosalía Martín, y ante unas 300 personas, Antonio Maíllo ha hecho hincapié en que "la falta de regulación respecto a quienes contaminan está generando un deterioro medioambiental".

Por tanto, ha apostado por una Ley de Fiscalidad Ecológica que, según ha recordado, estaba en el acuerdo programático del gobierno anterior pero que tras la ruptura no pudo aplicarse, y también por la promoción de la agricultura ecológica, una de las líneas fundamentales de la Ley integral de Agricultura, que suponga "una política agraria propia en Andalucía; proteja al productor frente a los abusos de los grandes distribuidores y formule una apuesta estratégica y clara por la agricultura ecológica como sostenible".

Así, junto a estas propuestas vinculadas al desarrollo medioambiental, Antonio Maíllo ha destacado la promoción de las energías renovables, considerando que en España "se ha producido un cambio de las reglas del juego, más propio de repúblicas bananeras que de un estado democrático, en contra de las energías renovables".

Antonio Maíllo ha subrayado la apuesta de IU por las energías renovables, la eólica y la solar, y por un cambio en esa promoción, y llegar así a la soberanía energética para que Andalucía "se convierta en una comunidad que tenga como horizonte, a largo plazo, la capacidad de generar su propia energía basada en las renovables".

A su juicio, "no puede ser que Andalucía produzca y consuma menos energía solar que Alemania, teniendo aquí muchas más horas de sol". Por tanto, considera que la promoción de este tipo de energía "no se debería haber abandonado nunca" porque, para Maíllo, la comunidad andaluza "tiene una gran proyección no sólo como sector estratégico en la economía sino como generador de empleo estable y de calidad".

A su vez, ha destacado el impulso a la rehabilitación de viviendas vinculado a la eficiencia energética "frente al ladrillo tradicional", que impulsaría una promoción de empleo hasta 2016 de casi 100.000 empleos y hasta 2020 de más de 137.000.

Gestión pública del agua

En esta línea, Maíllo ha abogado por un desarrollo económico y social sostenible y con una política, que tiene, a su vez, "una irrenunciable apuesta por la gestión pública del agua, en un momento de tanta privatización sobre todo por parte de los ayuntamientos". Para el líder andaluz, "un recurso como el del agua tiene que estar en manos públicas para ser bien planificado" porque es "un derecho humano y una garantía para todas las familias andaluzas".

No obstante, considera "fundamental" hablar de un nuevo modelo productivo vinculado a la conciencia de que "los recursos son limitados y que únicamente desde una gestión sostenida, racional y de sentido común de los mismos, se podrá dar un salto a un modelo de crecimiento que no se venga abajo al poco tiempo de iniciarlo", sino que tenga, ha continuado, "un carácter de sostenibilidad y de blindaje y sea radicalmente diferente al actual".

Por último, ha manifestado que su formación va a "aumentar" la representación parlamentaria porque "Andalucía necesita a IU", ha concluido Antonio Maíllo.