El arzobispo de Toledo, Braulio Rodríguez, ha asegurado que las voces reclamando que el Monasterio de Guadalupe se integre eclesiásticamente en una de las diócesis extremeñas "es un problema político y me atrevería a decir que un poco nacionalista", al tiempo que ha negado que el Arzobispado de Toledo "ponga alguna traba o problema" para que cualquier persona "venga de donde venga" pueda rezar o pasar un día en Guadalupe.

Rodríguez ha reaccionado de esta manera después de que este sábado medio centenar de personas se hayan manifestado en Toledo para reivindicar que la patrona de Extremadura, la Virgen de Guadalupe, pertenezca a una diócesis de la región. "No tengo nada que decir de la manifestación, tienen toda la libertad del mundo para manifestarse, faltaría más", ha recalcado.

Dicho esto, el arzobispo ha indicado que él no ha creado las diócesis en España, sino que "están creadas hace mucho tiempo y es una tarea exclusiva de la Santa Sede". "Cuando en el año 2009 el Papa Benedicto XVI me nombró arzobispo de Toledo, la Diócesis de Toledo tenía parte en Extremadura y parte en Toledo", ha explicado. "¿Cuál es la más importante?, se ha preguntado, para contestar a continuación: "Ninguna de las dos".

Por lo tanto, él se encontró con una situación que, a su juicio, es "perfecta", y a partir de ahí "se ha creado", a su modo de ver, "un problema artificial".

Asimismo y respetando a las personas que se manifestaron el sábado, ha pedido "no mentir ni levantar calumnias", aunque haya personas que puedan querer que Guadalupe pasara a Extremadura. "¿Acaso está Guadalupe en Ucrania?", ha ironizado.

Además, ha lamentado que se utilicen palabras que son ambiguas porque no existe ninguna provincia eclesiástica que se llame Extremadura, sino que existe una provincia eclesiástica que se llama Mérida-Bajadoz, que comprende tres diócesis: Mérida-Badajoz, Plasencia, y Coria-Cáceres.

"Esa otra parte de Extremadura que pertenece a Toledo lleva así desde hace muchos siglos. Si la Santa Sede llevara algún día a decir otra cosa, pues yo no tengo personalmente ningún interés en permanecer allí ni un solo momento. Pero no se trata de mí, sino del pueblo cristiano que vive allí, que jamás cuando he ido allí, han manifestado querer otra cosa", ha destacado el arzobispo de Toledo.

Finalmente, Rodríguez ha dejado claro que el 10 por ciento de los ingresos brutos que recauda el Monasterio de Guadalupe pasa a un fondo común para ayudarse unas parroquias a otras y "la Archidiócesis de Toledo no recibe ni un solo euro más". "Es la comunidad franciscana quien está encargada de la administración de los bienes monetarios", ha dicho el arzobispado, que ha tildado de "mentira" que la Diócesis de Toledo se esté "lucrando".