En el instituto Santa Irene fue necesario utilizar las ventanas para entrar. Las cerraduras fueron bloqueadas, en esta ocasión con hierros, y en la fachada del edificio el vandalismo se dejó notar  con pintadas en las que se podía leer:  «Vota idiota» o «Muerte al Estado, no votes», entre otras frases.

Salvados los actos vandálicos, tocó lidiar con los problemas técnicos. En el Centro de FP de Teis, las alarmas se dispararon al entrar y en el Centro de Educación Permanente para Adultos se produjo una avería en el cuadro eléctrico.

Abiertos los colegios, el problema fueron las papeletas. Faltaban en Casa da Cultura, CEIP Sárdoma-Moledo, Santo Tomé y en Balaídos. Además, dos miembros de las mesas electorales no ejercieron su función: uno se negó y otro no pudo acudir por motivos de salud.

A pesar de todo, las 369 mesas se constituyeron pasadas las 9.00 horas. Eso sí, los vigueses fueron más remolones que en años anteriores y a media tarde la participación era del 49,09%, frente al 52,42% de 2003.

Lluvia, nubes y claros en el cielo

Un día de lo más variado en cuanto a lo meteorológico se refiere animó a los vigueses a acudir a las urnas.  La afluencia a las 12.00 horas no llegaba al 10% en el  colegio electoral del Concello, pues el domingo permaneció con lluvias hasta pasado el mediodía. La tregua llegó poco después a los cielos e incluso por la tarde lució el sol, de ahí que tras la sobremesa la participación creciese.