La Guardia Civil ha desarticulado un grupo criminal dedicado al tráfico de hachís al que se le han incautado un total de 1.200 kilogramos de hachís ocultos entre toneladas de cebollas. Han sido detenidas e ingresadas en prisión siete personas de nacionalidad española e italiana, estos últimos presuntamente vinculados a la Camorra napolitana.

En el marco de la operación 'Caribe' se ha desarticulado este grupo que traía la droga por vía marítima desde Marruecos hasta España y, posteriormente, la trasladaba a Italia, según ha informado la Guardia Civil en un comunicado.

Asimismo, los agentes han intervenido 30,5 kilos de marihuana dispuesta para su consumo, 46.000 euros en metálico, una pistola, dos escopetas, vehículos, embarcaciones, joyas y abundante material para la preparación y ocultación de la droga.

Los miembros de la red, tras traer la droga por vía marítima desde Marruecos hasta las costas españolas la llevaban a una finca cercana a la localidad malagueña de Almogía. Allí manipulaban la droga ocultando los fardos de hachís en un camión entre toneladas de cebollas a granel, todo ello bajo la estrecha vigilancia de los individuos italianos, que permanecían en todo momento junto a la droga mientras ésta se encontraba en la finca.

De hecho vivían junto a la droga, pernoctando en una caseta de obra prefabricada situada junto al camión, que ellos mismos conducirían hasta Italia para su distribución posterior, han puntualizado desde el instituto armado.

Igualmente, aprovechaban los transportes para ocultar también grandes bolsas envasadas al vacío con gran cantidad de marihuana. Con este modo de ocultación pretendían eludir un posible registro de las unidades caninas a lo largo de su viaje y que el perro antidroga confundiera los olores con el de las cebollas.

Rodeado de lujo en la finca

En el interior de la finca, de más de 16.000 metros cuadrados, uno de los miembros de la banda vivía rodeado de lujo, un ejemplo de ello es que en su exclusiva vivienda poseía un lago artificial con cisnes, una caballeriza, una perrera completamente equipada con más de 20 perros de raza, una autocaravana, 12 motocicletas preparadas para su uso en competiciones, una embarcación de recreo, motos de agua, además de varios vehículos de alta gama.

Tras su puesta a disposición judicial, el juez decretó el ingreso en prisión de todos los detenidos en esta operación. La operación ha sido desarrollada por agentes de los Equipos de Policía Judicial de Alhaurín de la Torre y Coín, ambas unidades pertenecientes a la Comandancia de la Guardia Civil de Málaga.