El religioso detenido en Lugo por supuestos abusos sexuales a una menor de 17 años y a un discapacitado está en "ayuno voluntario" y se encuentra "mal de ánimo" por su situación, que le está "afectando mucho".

Así lo han manifestado este vieres a Europa Press fuentes de su defensa, que se han reunido durante la tarde con el religioso franciscano para conocer su estado, después de las informaciones que apuntaban a que podría haber comenzado una huelga de hambre.

Según ha manifestado el propio religioso, "no se encuentra en huelga de hambre", sino en "ayuno voluntario", una situación que pretende, por el momento, mantener en el tiempo.

Sobre esta cuestión, su defensa le ha trasladado su intención de "convencerlo" para que abandone el ayuno o, de lo contrario, solicitará al juez "que lo alimente".

En relación a su situación, el religioso se encuentra "mal de ánimo" y "muy afectado" por las noticias sobre él que puede leer en los medios. Al mismo tiempo, ha trasladado a su defensa que se encuentra muy afectado por "haberle fallado a la orden" con la ruptura de su celibato

Fue el pasado lunes, tras la denuncia de un particular, cuando se produjo el arresto por parte de agentes de la Guardia Civil del religioso, residente en la comunidad franciscana de Pedrafita do Cebreiro. Al religioso se le intervinieron dispositivos electrónicos, móviles y ordenador, en los que se descubrieron archivos multimedia, entre los que se incluyen imágenes en las que aparece el religioso con una menor manteniendo relaciones sexuales.

RECURSO

La defensa del religioso ha confirmado que la próxima semana presentará un recurso de apelación a la medida de prisión comunicada y sin fianza decretada por el juzgado para el religioso tras pasar a disposición judicial.

En este recurso, la defensa alegará que "no está demostrado" que hubiera abusos sexuales a un joven discapacitado de unos 20 años y defendiendo que las relaciones con la chica de 17 años "fueron consentidas".

Además, la defensa del religioso ha comentado que también pedirán a la comunidad franciscana "si hay posibilidad" de que lo acojan en otro destino que no sea el de O Cebreiro para seguir prestando su labor, donde residía hasta su arresto el pasado lunes.