La Diputación foral de Gipuzkoa y el Ayuntamiento de Deba han suscrito un acuerdo de colaboración para encargar un informe que determine la situación jurídica exacta y las medidas específicas necesarias para garantizar la protección de la cueva de Praileaitz, ubicada junto a la cantera de Sasiola.

En un comunicado, la institución foral ha informado de que el objetivo de este acuerdo es disponer de un informe global de la situación y de un diagnóstico "claro" de este entorno, afectado tanto por la Ley de Costas, la Ley de Minas y otras regulaciones relacionadas con el Medio Ambiente, carreteras o la Protección del Patrimonio, con el objetivo de "preservar la cueva y el valor de los hallazgos arqueológicos que se siguen descubriendo en la actualidad en Praileaitz".

El Gobierno vasco declaró 'Praileaitz I' Monumento Cultural del Patrimonio Vasco en 2007 y se aprobaron las correspondientes normas de protección, estableciendo las actividades que se podían realizar o no en este entorno.

Las excavaciones parten desde una bóveda de unos 60 metros, pero se han descubierto recientemente nuevas galerías de las que aún se desconoce tanto sus dimensiones como el patrimonio que puedan esconder. Es decir, los límites de la cueva han cambiado como consecuencia del descubrimiento de nuevas galerías.

La institución foral ha recordado que ha venido reclamando "infructuosamente" al Gobierno vasco que incremente el grado de protección de esta área. Ahora el informe que se va a encargar tratará de superar "la indeterminación sobre los límites de la cueva y la restricción de actividades en sus proximidades", ha indicado.

En la actualidad, Praileaitz y su entorno cuentan con una protección de 50 metros y técnicos y investigadores arqueológicos creen necesario que esa protección se extienda hasta los 100 metros. Lindando con Praileaitz se encuentra la cantera Sasiola.